lunes, 27 de diciembre de 2010

Tuning

Con cuatro horas diarias de gimnasio, una dieta estricta y largas sesiones de bronceado, el anciano logró cambiar su aspecto en pocos meses. Afeitó su barba y se mudó al Hemisferio Sur, donde cambió la calurosa chaqueta roja por una guayabera multicolor. Luego, vendió el viejo trineo para comprar un descapotable último modelo, y contrató a un fotógrafo prestigioso para que lo retratara en una playa, exhibiendo sus brazos recién tatuados.
Esa Navidad, repartió juguetes en tiempo récord, con la vitalidad de un hombre nuevo. Eso sí, con su imagen diferente impresa en las tarjetas, aquel año Unicef no vendió ni una postal.

Este microrrelato está incluido en la Breve antología de microrrelatos navideños elaborado por la Internacional Microcuentista.

miércoles, 22 de diciembre de 2010

El adelantado

Antes eran cuatro reyes magos. Pero un día, uno de ellos se cansó de que el camello se quejara todo el tiempo por su sobrepeso, y decidió comprar un vehículo más fuerte y veloz. Desde entonces, cumple con su trabajo en solitario, y concluye sus servicios once días antes que los demás.

viernes, 17 de diciembre de 2010

La mudanza

Un día, mi cuerpo se cansó de mí y me abandonó de golpe. Se levantó, se baño, se lavó los dientes y salió a la calle sin decir una palabra, con el ánimo visiblemente alterado. Yo lo observaba atónito desde la cama, ya que no podía levantarme sin mis piernas. Algunas horas más tarde, escuché unos ruidos extraños en la puerta, como si alguien estuviera forzando la cerradura. De pronto, la puerta se abrió y vi entrar al encargado del edificio con un policía que tomaba notas en una libretita.
–Aquí es donde vivía el pobre hombre –le dijo–. No tenía familia, ni tengo a quién avisar.
–¿Quién les dio permiso para entrar a mi casa? –les pregunté enojado.
Pero no obtuve respuesta. Claro, como no puedo moverme, ellos se burlaron de mí, hicieron de cuenta que no escuchaban mis reclamos, y me dejaron aquí abandonado por varios días.
Hoy recibí la visita de dos hombres corpulentos vestidos con uniforme de una empresa mudadora. Sin pedirme autorización, comenzaron a cargar mis muebles. Ya llevaron la mesa de la sala, la heladera y el sofá. El más corpulento de ellos me apunta con el dedo. “Desarma la cama y cargala en el camión”, ordena, y el otro se acerca con un destornillador.

domingo, 12 de diciembre de 2010

El juramento

Ella había mudado de barrio, había crecido, había encontrado la vida que tanto deseaba. Él respetó la distancia en silencio. Pero el día que cumplió 86 años, la buscó por cielo y tierra, hasta encontrarla.
–¿Te acuerdas cuando juré que te amaría hasta que fuéramos viejitos? –le preguntó.
Aunque ella recordaba aquella escena claramente, apenas insinuó un leve movimiento afirmativo de cabeza.
–Sólo deseaba que sepas que cumplí con mi promesa.
Y entonces el hombre, al descubrir las pupilas radiantes en esos ojos cansados que lo observaban con la misma dulzura que cincuenta años atrás, supo que haber cumplido con el juramento no había sido en vano.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Z.O.Z.

¡Uvo una revelion en mi teklado!

 Foto por JulianRod.

domingo, 3 de octubre de 2010

Si no fuera...

–Si no fuera porque estás tan lejos, iría esta misma noche a dormir contigo –dijo la voz en el teléfono.
–Te abriría las puertas encantada –respondió la mujer–. Si no fuera porque hoy regresa a casa mi marido, tras haber cumplido la condena por tu asesinato.

viernes, 17 de septiembre de 2010

Instantáneas de mis "Instantáneas"

Después de casi dos años de trabajo, el sueño del libro propio se hizo realidad. Como muchos de ustedes ya saben, acaba de ser lanzado Instantáneas, mi libro de microrrelatos editado en Buenos Aires por Andrómeda, que inaugura la colección Mitogenia.

El libro contiene 158 microrrelatos en un instante, dividido en cuatro partes: (i) Confesiones (microrrelatos contados en primera persona); (ii) Macrorrealismos (algunas microficciones no tan breves); (iii) Imposturas (reversiones de clásicos) y (iv) Fugacidades (una colección de hiperbreves).
"Instantáneas" se encuentra disponible en las librerías más importantes de Argentina, y también puede adquirirse en línea a través de los sitios de Tematika y Amazon.

Según puede leerse en su contratapa, en las palabras del editor Sergio Gaut vel Hartman, "Instantáneas es una colección de textos breves (y brevísimos) que sintetizan, usando apenas un puñado de palabras, ideas que podrían ser desarrolladas en una ficción más extensa. Martín Gardella eligió esta forma para expresarse, una destreza singular, con algo de excéntrica alegría y mucho de inteligente practicidad. En esta era aquejada por la escasez de tiempo, la posibilidad de escribir sintéticamente, utilizando la sagacidad del lector para llenar los huecos y completar las tramas, termina resultando un recurso formidable. Instantáneas evita lo superfluo y recorre un complejo mundo de fantasías, actitudes, horrores y visiones utilizando ciento cincuenta y ocho ojos. Gardella aborda la diversidad, lo que presupone riesgo, y la afronta de la mejor forma posible, desembocando en el único patio de comidas de este centro comercial: el que tiene tantos ingredientes como platos como cocineros como comensales. Pasen y coman, entonces. O mejor dicho, pasen y lean."

A continuación, comparto con Uds. unas fotos y algunos videos que muestran algunos instantes de la presentación del libro realizada en el Centro Cultural de la Cooperación, en Buenos Aires, el 8 de septiembre de 2010.

Hablando de Instantáneas
Martín Gardella con Sergio Gaut vel Hartman y la escritora Claudia Cortalezzi


 

miércoles, 15 de septiembre de 2010

El cuento perfecto

Ese año, el primer premio del concurso literario sería mío. Había logrado escribir un cuento maravilloso, que me dejaba conforme desde la primera a la última línea. El relato había surgido espontáneamente, luego de un sueño en el cual pude vislumbrar la historia completa sobre un narrador presumido, que creía haber escrito un cuento perfecto inspirado únicamente en sus extravagantes pesadillas. 
Esperé el resultado del jurado con gran entusiasmo. Sabía que, esta vez, mis chances de ganar eran muy altas. Fue por eso que jamás imaginé que esa carta recibida de los organizadores del concurso me anunciaría que había sido descalificado y, mucho menos, que me acusarían de cometer plagio, argumentando que mi cuento era idéntico a otro que había sido escrito mucho tiempo antes, por un tal Martín Gardella, en el año 2010.

lunes, 6 de septiembre de 2010

Condenación


El límite entre el cielo y el infierno es apenas una línea, que se extiende hasta un sonante aparato telefónico, que ella se niega a atender.

La foto "Cielo e infierno" es propiedad de Christian Pereira y se publica con autorización del autor únicamente para su exhibición en este blog.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

La pausa

Cada vez que ella me sonríe, se paraliza el Universo. Durante ese instante breve, que me parece infinito, todo el paisaje circundante se vuelve inmóvil y silencioso. Los pájaros quedan flotando estáticos en el aire, la lluvia detiene su caída imprevistamente, y las agujas de los relojes interrumpen su andar cansino. Solamente unos latidos atrevidos combaten la quietud con sus galopes, en señal de alegre bienvenida. Como si fuera capaz de escucharlos, ella me retribuye con una mirada que me dice: “estoy aquí”. Y entonces el Mundo, que quizás nunca estuvo detenido, parece retomar su curso repentinamente.

miércoles, 18 de agosto de 2010

Una misión imposible

Me encanta espiarla todas las mañanas, escondido detrás de una ventana entreabierta del dormitorio, mientras ella se pasea desnuda por la vivienda de enfrente. Pienso entonces en mil formas de acceder a esa hembra hermosa que me vuelve loco, pero todos mis planes se frustran antes de ejecutarlos. Si tan solo pudiera cruzar la calle angosta que nos separa e invitarla a dar al menos una vuelta a la manzana, sería más fácil. Pero, no hay manera, pobrecita. Ella está desde hace años en cautiverio, oprimida tras unas elevadas paredes impenetrables, sin tener siquiera un patio al que asomarse, para verme mover la cola de contento, o permitir que la visite para regalarle un hueso.

jueves, 12 de agosto de 2010

Una casa con diez pinos

La casa de campo luce encantadora entre la arboleda. El humo tenue brotando por la chimenea permite adivinar el clima ideal de su interior, contrastante con el frío invierno sureño que la rodea. Los chispazos de la leña encendida debajo de una burbujeante cacerola de hierro le otorgan al ambiente esa calidez perfecta que se observa desde el exterior. Una mujer camina con un plato de guiso caliente en su mano. Recorre el camino del pinar con una libertad envidiable. Ella es bondadosa y muy buena cocinera. Sale al encuentro de un hombre delgado que la espera hambriento debajo de uno de los pinos. Ella se acerca, pone el plato de comida sobre sus piernas y lo alimenta con generosidad. Él agradece estar vivo para seguir disfrutando aquellos manjares cada día, bajo la sombra de aquel árbol al que fue encadenado hace unos meses, hasta que logre pagar por esos tontos errores que cometió.

miércoles, 28 de julio de 2010

Algo en común

Una noche como cualquier otra, en el camino de regreso a su casa, un hombre se desorientó de repente. Entró por error a un edificio incorrecto, tocó sin querer el timbre de un departamento equivocado, le abrió la puerta una mujer que no era la suya, jugó por un rato con niños ajenos, ocupó la cabecera de la mesa a la hora de la cena y, antes de echarse a dormir en una cama mullida y tibia, le hizo el amor a aquella dama tan generosa, que no paró de sonreír desde que lo vio cruzar la puerta. Por suerte, logró volver en sí al amanecer, para llegar a tiempo a la oficina, como si nada hubiera ocurrido.
Sin embargo, algo extraño sucede desde entonces. Todos los jueves a la noche, el hombre vuelve a confundirse y pasa la noche fuera de la casa. Su esposa, un poco preocupada al principio, notó que los síntomas que aquejan a su marido resultan ser bastante comunes. Basta con ver, por ejemplo, al vecino del cuarto piso, que todos los jueves sufre los mismos problemas de desorientación, y toca por error el timbre de su puerta.

miércoles, 21 de julio de 2010

Tal para cual

Aquel monstruo era un tipo romántico. No le gustaba asustar a las mujeres, pero tampoco podía evitarlo. Era tan feo que no lograba acercarse a una dama, sin que ella huyera por el espanto. Pero encontró el amor en una mujer ciega. Ella no sabe de su fealdad porque jamás lo ha visto. Pasa las noches besando sus dos bocas, mientras lo estruja contra su redonda anatomía, con la fuerza insoportable de sus seis bracitos.

Este microrrelato fue elegido finalista del VIII Certamen Internacional de Microcuento Fantástica miNatura 2010.

viernes, 16 de julio de 2010

Hamelín

Aquel hombre tenía dos flautas mágicas. Con los sonidos agudos de la más pequeña, hechizó primeramente a las ratas y los niños. Con la otra, todavía más armoniosa, luego fue por las mujeres.

miércoles, 14 de julio de 2010

Ella IV

Ella tiene una mascota que no tolera mis visitas. Se queda gruñendo del otro lado de la puerta, cuando ella la encierra para darme amor. Asi, me siento más seguro. No vaya a ser que el loro nos vea y le cuente todo a su marido.

lunes, 12 de julio de 2010

Ella III

Ella cocina como los dioses. Prepara un entremés liviano, luego un plato principal. Y después cenamos juntos en penumbras, degustando un vino varietal. Pero lo que más disfruto es el momento en que ella clava sus ojos en los míos, y se transforma en el postre.

viernes, 9 de julio de 2010

Ella II

Ella me pide que le cante al oído. Elijo una canción romántica que lleva su nombre, y la entono dulcemente, imitando a Nino Bravo. Pero ella se enfada y me pide que me vaya. No soy Noelia, me dice. Es cierto, ella es Mabel.

martes, 6 de julio de 2010

Ella I

Ella se muestra inmutable cuando le digo que la extraño. Como si no le importara todo el amor que le confieso a diario, sólo esboza una sonrisa, encantadora y desafiante, desde el frío portarretrato.

martes, 29 de junio de 2010

After shave

Es sabido que el conde no tiene espejos en el castillo. Así, le resulta casi imposible afeitarse el rostro sin lastimarse. Pero un vampiro barbudo perdería su natural encanto, aseguran las doncellas. Por eso, se ofrecieron gentilmente a rasurarlo, con especial dedicación. Esa hubiera sido una solución simple para los problemas de acicalamiento del ilustre caballero, si no hubiese sido tan difícil controlar esa afilada cuchilla y tan tentador aquel cuello blanco y suave, bañado de rojo.

jueves, 24 de junio de 2010

Un esposo a medida

Apenas ella introdujo la moneda en la ranura, la computadora comenzó el extenso cuestionario. Le invitó a seleccionar el color de ojos, tipo de cabello, signo del Zodíaco, medidas, altura, peso, fisonomía, entre otras cualidades. La asombrosa máquina reuniría todos los deseos en un hombre perfecto, que sería creado a su medida, en apenas un instante.
Sin embargo, al abrirse la compuerta, para mostrarle aquel cuerpo masculino emergiendo entre la humareda blanca, se sintió decepcionada. Él cumplía perfectamente con todas las características elegidas, pero resultó ser una copia exacta (y en consecuencia, espantosa) de su ex marido.

lunes, 21 de junio de 2010

Taxímetros II

Acomodó en el baúl del automóvil una caja con bebidas alcohólicas, algunas sustancias prohibidas y una docena de discos de heavy metal.
–¿Adónde vamos? –preguntó el taxista.
–Al mejor lugar del Mundo –respondió el sujeto de los cuernitos.
Y el asfalto se abrió por debajo del vehículo hasta devorarlos.

miércoles, 16 de junio de 2010

Se acabó la espera...

De la unión de seis fanáticos de la microficción, desde distintas partes del planeta Tierra, llega el hito que revolucionará el universo de lo breve.






Te invitamos a conocerla, haciendo click aquí.

lunes, 14 de junio de 2010

Taxímetros I

Aquel taxista tiene varias personalidades. En tal solo una jornada laboral, es capaz de sostener ideologías políticas contrapuestas, mudar de equipo de fútbol o cambiar su estado civil múltiples veces.
La mutación es casi automática. Un hombre distinto aparece sentado frente al volante cada vez que un nuevo pasajero abre la puerta.

miércoles, 9 de junio de 2010

Confesionario repleto

Por favor, sea breve, dijo el cura confesor. Limítese a contarme los datos jugosos, sobre todo aquellos que involucren a vecinos de la parroquia.

El presente microrrelato es uno de los que tres textos de mi autoría (en este caso, el más breve) que participaron -sin éxito- en el concurso "Por favor, sea breve", organizado por la editorial Páginas de Espuma.

viernes, 4 de junio de 2010

El Living viaja a Perú

Sabrán disculparme porque hoy no los espero con un nuevo relato. 
Nuevamente me tomo el atrevimiento de molestarlos para compartir con ustedes la noticia de que algunos de mis microrrelatos han sido seleccionados para su publicación en dos revistas literarias de Perú.
La primera de ellas, es la Revista de creación Ónice, un proyecto editorial dirigido y conducido por el grupo Ónice, colectivo fundado hacia fines de 2005 por estudiantes de la Facultad de Letras de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, que tiene por objetivo la difusión de la práctica literaria así como la reflexión en torno al quehacer literario en general.
De un total de 136 textos enviados por distintos escritores, entre poemas, cuentos y ensayos, provenientes de Perú, Argentina, Chile, Colombia, EE. UU., Suecia y España, los responsables de dicha revista han seleccionado mis microrrelatos "Adoración" y "El genio", para ser publicados en su número 4, a editarse en junio de este año.


Por otra parte, en el marco de la tercera convocatoria lanzada por Plesiosaurio, la primera revista de ficción breve peruana, su Comité Editorial ha seleccionado gentilmente algunos de mis textos para su publicación en su número 3, de próximo lanzamiento.
En este caso, es un placer muy especial poder compartir la lista de autores de dicha publicación junto a otros escritores que merecen mi admiración (y que tengo el placer de conocer), como Ana María Shua, Sandra Bianchi, Antonio Cruz y Alejandro Bentivoglio (todos ellos, de Argentina) y Esteban Dublín (de Colombia), entre otros reconocidos escritores.
Quiero agradecer especialmente a ambas publicaciones por permitirme llegar con mis letras hasta el Perú, un país que me gusta mucho, y que he tenido la oportunidad de visitar en más de una oportunidad.

miércoles, 2 de junio de 2010

Celos

Sonrío, y el hombre del espejo también esboza una sonrisa. Acomodo mis cabellos con un peine de color azul, y observo que él se peina en idéntico modo, con el mismo adminículo. Me afeito y se afeita. Me perfumo y se perfuma. Lo miro y me mira. Imita a la perfección todos mis movimientos, mi vestimenta, mis gestos, y quizás también todos mis apetitos.
Esta sería sólo una situación simpática, si no fuera porque hoy voy a encontrarme con la mujer de mi vida. Sospecho que él está igualmente enamorado de ella y que, por tal motivo, replica todos los sucesos de la ceremonia previa, con el único objetivo de ocupar mi lugar en ese encuentro.
Lógicamente, harto de tantas emulaciones, comienzo a odiar a ese hombre. Pero noto que él también se encoleriza, como si pensara que el imitador soy yo. Sin poder evitarlo, nos trenzamos en una lucha a puñetazos, a pesar de que al soltar el primer golpe, nuestros nudillos colisionan duramente contra el vidrio. Nos duele, sangramos, y ambos perdemos la pelea por abandono. 
Luego, salimos en tropel hacia la calle. Allí larga la carrera en la cual competimos por llegar en primer lugar a la cita con la mujer amada. Como premio, el vencedor podrá tener curadas sus heridas, gracias a la dulce suavidad de sus caricias.

viernes, 28 de mayo de 2010

El banquete

–Tengo ganas de comerte a besos –dijo el hombre.
La mujer entusiasmada accedió a la propuesta sin dudarlo, ya que el varón y su oferta resultaban atractivos.
Pero el muchacho fue incapaz de dominar, sólo con besos, la sabrosa tentación que le provocaba aquel cuerpo expectante tan carnoso. La muchacha complaciente era tan bella, que él no pudo evitar sentir algo de pena, en el instante exacto en que ese lobo insaciable, que lo posee por las noches, abrió sus fauces.

martes, 25 de mayo de 2010

El que espera

Tras largos meses de expectativa, noté el centelleo de una botella entre la espuma. Un papel amarillento, perfectamente enroscado en su interior, me traía sus noticias. Decía que le gustaban mis cartas, que deseaba conocerme y que también estaba enamorándose de mí.
Sentí el impulso de echarme a nadar, abandonar aquella isla aburrida definitivamente. Sería capaz de cruzar el océano para ir a buscarla, sin importar la distancia a la que estuviera la otra orilla. Sin embargo, una línea inesperada al final del mensaje complicó todos mis planes. Allí, en odiosas letras claras y bien definidas, distinguí mi propia firma.

jueves, 20 de mayo de 2010

Pasión alienígena

Ella es una chica de otro planeta. Tiene una nave espacial camuflada en la cocina de su casa, pero lo niega (dice que sólo es un electrodoméstico un poco antiguo, que hace un ruido muy particular). Disimula, prefiere ocultar su origen. Habla perfecto español, toma mate, come empanadas. Apaga las luces de su dormitorio cuando la desvisto, alegando ser un poco vergonzosa. Quiere convencerme de que es una mujer normal, pero no lo logra. Las caricias de sus manos de ocho dedos la descubren. Y sus besos hechiceros, tan distintos a todo lo antes conocido, tienen el sabor característico de las estrellas.

martes, 18 de mayo de 2010

Armonioso abracadabra

Amaba a la mamá de Ana apasionadamente. Alma adolescente, auténtica argentina, ansiosa, asustadiza. Animal adorable, adiestrada actriz, artista admirable. Atrapaba Adanes adultos astutamente, arremetedora, acechante. Amigable hada, amorosa alteza. Daban ganas de abalanzarse. Abanderada del amor, ágil abdomen aterciopelado, adorable aguamarina. Amante ardiente agradecida, largas patas de aguja, abundantes alaridos, abrazos apretados de algodón, asesina de almohadas. Asaba las achuras con aderezos, amasaba las pastas acarameladamente. Admirable azúcar afrodisíaco, apetitosa, adictiva. Astuta ave. Adoraba a Allende, Arlt y Alfonsina. Cantaba alegremente acordes de Abba, Aznar y Maná. ¿Adónde andará ahora? Cansada de tanta asonancia, me abandonó sin adioses ni advertencias, por un adinerado abogado aguafiestas, llamado Ernesto.

Inspirado en el microrrelato "Palabras parcas", de Luisa Valenzuela.

jueves, 13 de mayo de 2010

La sirena del desierto

En aquel desierto enorme, habita una sirena. Atrae a los viajeros con canciones melodiosas, imitando a aquellas que logró burlar Ulises. Aparece de repente, en medio de un maravilloso oasis, hacia el que corren los cansados peregrinos, encantados, en busca de descanso. Con el agua dulce de sus besos, sabe calmar la sed brutal de los aventureros que, sin poder evitarlo, se atreven a cortejarla. 
Es allí cuando, por un instante, las arenas tibias del desierto se transforman en un mar hambriento, al que sólo sobreviven unos pocos hombres que, a pesar del cansancio y la corriente en contra, se animan a nadar.

martes, 11 de mayo de 2010

Presentación del libro "Habitar en secretos"

Quiero contarles que, el pasado 2 de mayo de 2010, en la sala Julio Cortazar de la 36a. Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, fue presentado el libro de cuentos "Habitar en secretos", de la Selección de textos 2009, 3º cuatrimestre de Editorial Dunken.
Estuvieron presentes la seleccionadora Marta Rosa Mutti, la artista plástica Pina Poggi (responsable del arte de tapa) y la cantante melódica-pop Virginia Fiorotto.
En dicho libro se incluyó mi relato "Un beso y una flor", anteriormente publicado en este blog.
Por eso, tuve el placer de concurrir al evento, por invitación de la editorial Dunken, quiénes gentilmente me hicieron entrega de un ejemplar del libro y un certificado de participación. 
El libro incluye, además, otros muy buenos relatos de escritores de distintos rincones de la República Argentina. ¡Se los recomiendo!


En la foto, con la artista plástica Pina Poggi y la escritora Marta Rosa Mutti.

viernes, 7 de mayo de 2010

Amor ciego

Desde que empezaron a gustarle todas esas cosas que él le hace, de repente y sin pedir permiso, ella no pudo evitar enamorarse de aquel hombre invisible.

miércoles, 5 de mayo de 2010

El jefe ermitaño

En la oficina donde trabajo, teníamos un jefe demasiado retraído. Era un hombre callado, al que le gustaba aislarse en la pequeña oficina del rincón, con la puerta siempre cerrada. Llegaba antes que nadie a su despacho, y se retiraba en último turno. Nunca lo escuché decir palabra, ni siquiera un reproche o una felicitación, y le había ordenado a su asistente que filtrara todas las llamadas entrantes. Se fue enclaustrando con tanta displicencia en su reducido universo, poblado de carpetas desordenadas y libros gruesos, que llegamos a olvidar que estaba allí. Por fin, una tarde en que debimos desalojar el edificio por una alarma de incendio, pudimos ver al viejo solitario por única vez. Los bomberos acababan de encontrarlo, taciturno y maloliente, entre las espesas telarañas.

viernes, 30 de abril de 2010

Algo está podrido en Dinamarca

Un vetusto esqueleto sin cabeza recorre a tientas las oscuras calles de Copenhague. Busca con desesperanza a aquel príncipe dubitativo que, hace siglos, profanó sus restos. Le han dicho que se llama Hamlet.

miércoles, 28 de abril de 2010

Una actuación memorable

Nunca vi a nadie que se compenetrara tanto en sus personajes como lo hacía Reinaldo García. Podía interpretar con la misma pasión y plasticidad a un quieto árbol del bosque o al Macbeth de Shakespeare. Con actuaciones dignas de premios y buenas críticas, siempre lograba que el público estallara de júbilo en el aplauso final. ¡Qué buen actor, por Dios!
Es una pena que ya no pueda regalarnos semejantes actuaciones. Murió en escena el día del estreno de aquella fatídica obra en la que le tocó representar la escena del suicidio.

lunes, 26 de abril de 2010

El reflejo

Desperté de golpe sin saber quién soy. Una mujer duerme a mi lado. Es bella, pero ignoro quién es y cómo llegó hasta aquí. Tampoco sé donde estoy ni porqué me encuentro en este lugar. Me miro al espejo ubicado en una de las paredes del ambiente. Veo un rostro de ojos verdes que me resulta desconocido. Abajo, dos senos redondos, perfectos, y un par de piernas largas, infinitas. Observo atentamente a la dama que aún dormita, y me sorprende notar que tiene un cuerpo idéntico al que acaba de mostrarme el espejo. Ella abre los ojos y me mira con curiosidad. Luego, comienza a hablarme naturalmente, como si no le asombrara la situación, ni nuestra increíble identidad física. Me dice que mi nombre es Angelina, que tengo treinta y ocho años, y que deberé ocupar su lugar tan pronto como la enfermedad terminal que sufre acabe con su vida. Hasta que eso ocurra, ella me transmitirá todo lo que necesite saber, para convertirme en un reflejo exacto de su existencia. También me enseñará a amar al hombre que nos observa sonriente del otro lado del vidrio, su marido, mi futuro esposo, el artífice absoluto de su exitosa clonación.

viernes, 23 de abril de 2010

Crónica de terror

Con la luz apagada dentro de mi cuarto, oigo el andar de un ser monstruoso que merodea mi vivienda. Respiro despacio para que no note mi presencia, mientras trato de cubrir la luz de la linterna bajo la cual escribo esta crónica desde mi escondite. Escucho sus pasos cercanos, justo del otro lado de la puerta. El sujeto amenazante comienza a rasgarla duramente; no creo que la madera pueda resistir por mucho tiempo. Siento el hedor nauseabundo que desprende su cuerpo abominable, y no puedo evitar un estornudo. Veo su sombra amorfa dibujándose en el techo. Tiemblo un poco, inevitablemente, pero prefiero seguir escrib…

miércoles, 21 de abril de 2010

Amor salvaje

A ella le encanta exhibirse desnuda ante su enamorado. Algunas veces, se anima a mostrarse completa; otras, en cambio, prefiere insinuar sólo un poco, como haciéndose rogar. Por momentos, ella elige ocultarse entre las sombras, para aumentar el deseo, y obligarlo a imaginarla en la oscuridad.
En cualquiera de los casos, él la ama locamente, y responde a su presencia con aullidos, cuando el sol se oculta tras la arboleda del bosque, para permitir que ella aparezca, lejana y radiante, en medio del cielo.

lunes, 19 de abril de 2010

Buenas noticias II

Hoy los molestaré con una entrada informativa, espero sepan disculparme. No quiero pecar de presumido, pero la alegría es tan grande que necesitaba compartir estas nuevas buenas noticias con todos ustedes.
Se trata de tres publicaciones en papel que contienen relatos de mi autoría, todos ellos aparecidos previamente como entradas en este Living.

1) En primer lugar, estoy muy feliz por haber sido publicado en España, dentro de la antología de microrrelatos llamada "Supervivencia", de Ediciones Fertguson.

Dicho libro está compuesto por los 149 finalistas del Certamen de Relato de Ediciones FERGUTSON correspondiente al mes de Noviembre ‘09, e incluye mis microrrelatos "Las visitadoras", "El conjuro", "Tres deseos", "Antes que llegue el rojo amanecer", "El cuento de otro Mundo", "El nacimiento de Iemanjá", "Las mil y una bodas",  "El olvido fatal", "Un relato de otro autor" y "El reencuentro".
Si alguien estuviera interesado en comprar un ejemplar, pueden adquirirlo en línea, a través de este enlace.

2) También quiero anunciarles que mi cuento "Un beso y una flor" ha sido seleccionado por la escritora, docente y periodista Marta Rosa Mutti, para integrar la antología "Habitar en secretos" de Editorial Dunken.

Este libro será presentado y puesto a la venta el 2 de mayo de 2010, en el marco de la 36a. Feria Internacional del Libro de Buenos Aires.

A partir de esa fecha, seguramente podrán adquirirlo también en la librería virtual de la editorial, a la que pueden acceder en este enlace.

3) Por último, quiero contarles que esta semana han publicado mi microrrelato "Esperando al Teté" en el N°32 de la Revista Oblogo, de amplia distribución gratuita en la ciudad de Buenos Aires.

En dicha publicación se agregaron, además, los comentarios de algunos lectores del Living a dicha entrada del blog.

Si alguno estuviera interesado en leerla, pueden descargarla gratuitamente en este enlace.

viernes, 16 de abril de 2010

El rey justo

Parado frente al trono de su majestad, el bufón pedía clemencia entre sollozos. Alegaba haber usado sus rutinas más geniales para entretenerlo, pero el rey ni siquiera había esbozado una mueca de contento.
Fue entonces que el jocoso animador se acercó hasta la fosa y, dando un triple salto mortal en el aire, se arrojó de cabeza a los leones. Así, el monarca rió satisfecho y confirió su perdón tan anhelado: ordenó que los soldados colocaran al virtuoso artista en un sector destacado del Panthĕon.

viernes, 9 de abril de 2010

El café frío

Como todas las mañanas, leía el diario mientras tomaba un café cerca de la oficina. De repente, vi aparecer a Eduardo cruzando la puerta. Hacía mucho que no lo veía al flaco; estaba casi igual que la última vez que nos habíamos encontrado, algunos años atrás, en esa misma cafetería.
Se acercó caminando directo hasta mi mesa y festejamos el casual encuentro con un abrazo amistoso. Lo invité a sentarse y tomar un café conmigo. Le conté acerca de mi vida, de cómo estaban los chicos, mi esposa, los perros, nuestros amigos en común. Sin embargo, él me escuchaba en silencio, con apatía, apuntando su mirada triste hacia la tacita de café que se enfriaba pasivamente. A pesar de mis preguntas, no quiso contarme nada acerca de sus cosas, salvo algunas quejas por tener demasiado tiempo libre en esos días. Al despedirse, noté que lo estaba haciendo para siempre. Se alejó sin darse vuelta, arrastrando los pies, esquivando las mesas tardamente. Estaba raro.
Me quedé leyendo el diario por un rato. Descubrí que el nombre del flaco se repetía varias veces, escrito en negritas, entre las necrológicas.

miércoles, 7 de abril de 2010

El palacio de arena

El muchacho se propuso construir un fascinante castillo de arena, con sólo un balde y una palita. Elevó seis torres colosales, unidas por un muro de tres metros para asegurarle privacidad. Cavó una fosa enorme alrededor de la muralla buscando darle protección. Distribuyó los ambientes con estilo antiguo, primero cuatro dormitorios, luego otros tres (en definitiva, un palacio real como ese no podía tener menos comodidades). En la amplia suite nupcial con vista al mar ubicó la figura de su princesa soñada.
Se detuvo a observar a la doncella asomada por la ventanita de sus aposentos. Ella devolvió la mirada con una sonrisita pícara, mientras desajustaba su traje principesco elegantemente. El joven abandonó sus pertenencias en la orilla y trepó ágilmente el muro del palacio hasta la abertura de la habitación de arena, donde la mujer lo esperaba para agradecerle por la generosa construcción.
Las endebles paredes del palacio resistieron poco. Las bravías olas del ocaso derribaron sin piedad las torres gigantescas y alisaron la fosa protectora, devorando a su paso todo aquello que se animó a interponerse.
El constructor y su princesa no llegaron a darse cuenta.

miércoles, 31 de marzo de 2010

Platero y ellas

Platero es pequeño, peludo, suave; tan blando por fuera, que las vecinas se pelean por llevarlo a su cama.

sábado, 27 de marzo de 2010

El origen del caos

Cuando finalmente descansó, la creación quedó a la buena de Él.

jueves, 25 de marzo de 2010

El fin de la espera

La esperé durante años. Sabía que, tarde o temprano, la vencería la tentación de venir a buscarme. 
Apareció por fin un día lluvioso, de pie frente a mi puerta. Tenía la mirada triste, pero su piel aún era blanca y hermosa, como en mis sueños. Sentí sus brazos fríos rodeando mi cuerpo y la noté muy delgada, quizás demasiado para un hombre corpulento como yo. 
Mi viejo corazón se sacudió con fuerza, pero luego se aplacaron lentamente sus latidos. Me dejé invadir por la paz de sus caricias y me fui olvidando de la lluvia, de los años pasados y de su espantosa delgadez.
En ese instante, mientras mis ojos soltaban sus últimas lágrimas, ella levantó en el aire su guadaña.

lunes, 22 de marzo de 2010

Pequeño bestiario sin ilustraciones

(Una colección de seres extraordinarios pero encantadores)

"El Vafoso"

Oriundo del África occidental, el Vafoso era una especie carnívora de simio, con una boca desproporcionadamente grande, capaz de emanar un aliento deletéreo, que adormecía a sus víctimas para luego devorarlas con tranquilidad. Según cuentan las crónicas de la época, la vida de aquel ser monstruoso habría sido extremadamente breve. Su mortal arma de ataque se habría vuelto inútil desde la invención del chicle.

"La Desafinada"

Con cuerpo de sirena, pero cuerdas vocales de hombre, la Desafinada moraba las costas del Peloponeso en la Edad Antigua. Con su voz de tenor desafinado, buscaba atraer a los marinos hasta sus aposentos, para poseerlos por toda la eternidad. Sin embargo, su inocultable nuez de Adán, sus senos deformes y su cola de ballena, la hacían poco atractiva para los piratas, que preferían la abstinencia a semejante experiencia. Dicen, entonces, que la Desafinada alcanzó la vejez sin conocer hombre alguno, o que habría muerto muy joven, a causa de la tristeza.

"El Hombre Toro"

Descendiente lejano del famoso Minotauro, el misterioso Hombre toro vivió en Europa oriental durante el siglo XVIII. Fue perseguido durante un lustro por los pastores rurales, acusado de abusar de sus vacadas. Finalmente, fue atrapado y condenado a muerte, sin necesidad de enjuiciamiento. Una teoría, aún no demostrada científicamente, asegura que el origen del mal de la Vaca Loca habría sido el impacto sufrido por el ganado, al ver el cuerpo decapitado de la bestia, colgado en cruz junto a las brasas.

"El Rinoganso"

Con cuerpo de rinoceronte y patas de ganso, el abominable Rinoganso tuvo una corta existencia en las llanuras que rodean el Río Congo. La pesadez de sus cuernos relajados sobre el morro no le impedía evacuar unos extraños graznidos que precedían la hora del baño. Tuvo una muerte estúpida, propia de un ganso. El sacudimiento ágil de sus extremidades cortas no fue suficiente para mantenerlo a flote sobre el río que traga a los demás ríos, y a todos aquellos que intentan cruzarlo.

"El Quelonius Lepus"

De origen posterior al Diluvio (durante el cual se produjeron inexplicables cruces), el Quelonius Lepus fue el único ser vivo de la familia de los sauromamíferos, caracterizado por tener cuerpo de liebre y caparazón de tortuga. A pesar de la agilidad que le daban sus patas cortas y peludas, se caracterizaba por ser un animal de movimientos vagos y limitados. Cuando iniciaba una caminata hacia cualquier destino, su rostro mostraba el entusiasmo propio de un velocista, pero el cuerpo se movía al ritmo de un perezoso. Semejante contradicción lo convertía en un bruto carente de personalidad, y también de amigos.


Este "Pequeño bestiario sin ilustraciones" de mi autoría fue publicado previamente (y de manera inédita) en la Nave de los Locos de Fernando Valls, el 20 de marzo de 2010, antes de su publicación  (con su consentimiento) en el Living sin Tiempo. ¡Gracias Fernando! 

viernes, 19 de marzo de 2010

Falso adiós

El plan era perfecto. La botella no tenía veneno, ni la daga filo. No habría autopsias ni largas ceremonias funerarias, sólo algunas lágrimas de padres tristes, mezcladas con una extraña sensación de alivio. Saldrían del sepulcro a la medianoche para encontrarse, sonrientes, en las puertas de Verona. ¡Basta de citas en balcones o de estúpidas peleas callejeras! El amor debía triunfar, por encima de todo. Pero ni siquiera el más triste de los sueños eternos de Julieta hubiera imaginado un final tan sorprendente: la carrera enamorada de Romeo hasta Venecia, tomado de la mano del joven Mercucio.

miércoles, 17 de marzo de 2010

Infusiones

Todas las mañanas, discuten por cualquier cosa. Si ella prepara té, él quiere café. Si sirve café, él lo encuentra demasiado dulce, frío o muy pequeño, o se le antoja con leche, o prefiere que le cebe un mate.
Pero, a partir de hoy, ella no quiere discutir más. Satisfará obedientemente todos los gustos de su esposo en el desayuno. Total, cualquiera de las infusiones servirá para esconder el sabor del veneno. 

lunes, 15 de marzo de 2010

Amor de geisha

Juro que te amaré sin límites ni condicionamientos, todo el tiempo que dure tu visita.

viernes, 12 de marzo de 2010

Los caminantes

Me encanta pasear por la calle Florida. Es divertido observar en silencio a los veloces transeúntes de múltiples razas, escuchar a los artistas callejeros y dejarme tentar por las ventas ambulantes. Pero lo que más disfruto son los encuentros fortuitos, en medio del gentío, con esos sujetos exánimes que deambulan por el microcentro, invisibles a los demás caminantes, y tan parecidos a mí.

miércoles, 10 de marzo de 2010

Fe de erratas

En el relato “Traición”, donde dice: “acabó con la vida de ese sucio”, debe decir: “acabó con la viuda de su socio”.

lunes, 8 de marzo de 2010

The Full Monty

Ella se ubicó en el medio de la sala para regalarme un show que sería inolvidable. Al ritmo de un blues salvaje, comenzó a desvestirse. Se sacó el sombrero agitando sus cabellos enrulados, y aflojó su falda sensualmente, para dejarla caer con un suave movimiento de cadera. Revoleó sus tacones, se quitó las medias, siguió con la camisa, luego el sostén.
Frente a mi entusiasmo por su desnudez completa, decidió romper los límites. Aflojó su cabellera hasta retirarla por completo y extrajo con los dientes las uñas recién pintadas de sus manos. Deslizó hacia abajo su piel blanca, para descubrir su carne joven y delicada. Sacudió brutalmente su abdomen, para dejar caer los bíceps, los glúteos, los gemelos, el esternocleidomastoideo y las prótesis mamarias. Respiró profundo antes de arrancarse los pulmones, el hígado, el estómago y los intestinos. Siguió con la extracción delicada de sus huesos, desglosando los húmeros, los fémures, las tibias y los peronés, con un sacudimiento digno del Folies Bergère. Se aflojó la mandíbula, desprendió sus costillas y fue enrollando mansamente todo el sistema nervioso sobre su corazón galopante.
Finalmente, mientras me observaba por el cuenco de sus ojos, su lengua me preguntó si había disfrutado el espectáculo. Me encantó, respondí, y pude ver una amplia sonrisa suspendida, que luego se desarmaría contra el suelo, junto al resto de su inconstruible cuerpo. En el aire, aún se siente su perfume y se escuchan sus latidos.

sábado, 6 de marzo de 2010

Uncleaning shampoo

Friego mi cabeza hasta lograr abundante espuma. Repito la operación dos veces, como indica el envase. Intento que el champú penetre por los poros del cabello para borrar ciertas imágenes de mi memoria, pero es inútil. Ella seguirá allí, invulnerable al lavado, tentándome a volver a verla cada tanto, igual que siempre.
Abro los ojos cuando termina el enjuague y me entusiasmo al ver sus pies delgados ingresando sigilosamente a la bañadera.

jueves, 4 de marzo de 2010

Cuestión de hábitos

Aquel hombre tiene hábitos variados. El primero es el que viste, prolijamente cada mañana, para oficiar la misa. Otro, la lectura silenciosa de La Biblia en el salón de los rezos, suavemente perfumado con incienso y mirra. El último, para nada incompatible, el que adora practicar, sin compunciones, con la joven catequista.

lunes, 1 de marzo de 2010

Con justa causa

En camino hacia el bufete de abogados, me detengo frente a un semáforo en rojo. Mientras un joven limpia la ventanilla de mi vehículo, rememoro la vehemente discusión que tuvimos con Raquel, en la que me lanzó un conjunto de reproches, por los cuáles hoy estamos embarcados en un arduo juicio de divorcio. ¡Qué necio fui! ¿Cómo pude hacerle una broma semejante? 
Al extender la mano para darle una moneda al muchacho de la esponja, compruebo que aquel húmedo utensilio es idéntico al incluido en el set de limpieza que le regalé a Raquel por su cumpleaños, el día de nuestro último altercado.


Este relato fue presentado al II Concurso de Microrrelatos sobre abogados del mes de febrero de 2010, en el cual era obligatoria la inclusión de las palabras indicadas en negrita.

viernes, 26 de febrero de 2010

Un año

Hoy se cumple un año de la primera entrada de este blog. Por eso, para agradecerles su amistad y constante participación, los invito a la fiesta de disfraces que haremos en el Living. Yo me disfrazaré de dinosaurio, en homenaje a Monterroso. Habrá música, bebidas libres y una torta pequeña (como la microficción) adornada por una velita. ¡Soplen conmigo! Mis tres deseos son para ustedes. Gracias por todo.

miércoles, 24 de febrero de 2010

El genio

Froté la lámpara maravillosa por tercera vez.
– ¿Qué deseas? – preguntó el genio del turbante.
– Quiero ocupar tu lugar – le respondí.
Desde entonces, cada vez que quiero algo, friego mi lámpara y aparezco.
Ya no tengo pretensiones insatisfechas, eso es bueno. Pero me aflige sentir que, con el tiempo, esta horrible omnipotencia en cautiverio me fue robando el placer de desear, y de cumplirle a quién me llame sus deseos.

lunes, 22 de febrero de 2010

Manuela

Las arrugas estampadas en su cuerpo mínimo se multiplicaron en concurrencia con cada evocación de su lejana adolescencia, en la que supo tener todo lo que había anhelado, para luego abandonarlo en un suspiro, por un amor que creyó especial, pero resultó efímero. Mala elección, pensó después, aunque ya era tarde para volver a empezar. Hoy, en la quietud agobiante de su Pehuajó natal, ella espera en solitario el fin de sus días, mientras canturrea una canción triste y desalmada, añorando con delirio aquellos años glamorosos en París.

viernes, 19 de febrero de 2010

Non cogito, ergo sum

Observo hace horas una hoja vacía. A pesar del esfuerzo por escribir algo nuevo, no logro gestar una idea, mi mente está en blanco. Entonces, recuerdo el planteamiento filosófico de Descartes, por el cual afirma su existencia (y la de todos los hombres) por el simple acto de pensar. ¿Acaso habré dejado de existir? Sin embargo, noto que, aun en los casos en que mi mente se vuelve perezosa, existe en mí un ser que podría pensar en algo, pero elige no hacerlo. Puedo argumentar entonces que, aunque no pienso, existo. Ergo, Descartes no existe.

miércoles, 17 de febrero de 2010

Ménage à trois

Antes de apagar la luz del cuarto, la mujer susurra al oído del señor Jekyll:
- Por favor, cariño, esta noche invítalo a Hyde.

lunes, 15 de febrero de 2010

Oportunidad

– Será mejor que venga ahora – le dijeron – están por comenzar los carnavales y no habrá viajes al infierno hasta el mes que viene.

viernes, 12 de febrero de 2010

Perdidos en la nieve

Después de varias horas, nos detuvimos para almorzar. De acuerdo a lo pactado, invertimos los roles que habíamos ocupado durante la cena. Esta vez, yo fui el encargado de preparar la comida, y ella de donar su carne.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Abrazos

Se soñó rubio y de ojos celestes, envuelto en el abrazo tibio de numerosas mujeres, que se peleaban por tenerlo para ellas solas, por lo menos un ratito.
Despertó al escuchar los gritos:
- ¡Puje, señora! – decía la partera.

lunes, 8 de febrero de 2010

Quiromancia

Sentada frente a una mesita de madera, la pitonisa observaba con atención las nerviosas manos frías de un cliente.
– Esto es muy extraño – reveló la adivinadora – tu línea de la vida ha desaparecido.
– ¿Y eso qué significa? – preguntó el joven con desconfianza – ¿moriré pronto?
– No lo creo. Lo más probable es que ya estés muerto.

viernes, 5 de febrero de 2010

Lluvias

Afuera llueve torrencialmente. El golpeteo del agua contra el tejado me recuerda a ella, aferrándose a mi pecho, cuando oía los truenos. Busco refugiarme entre las sábanas, al notar que empieza a lloviznar también adentro.

martes, 2 de febrero de 2010

Adoración

El mar adora a los soñadores. Por eso, engulle con olas descomunales a aquellos que gustan pasar largo tiempo sentados en el muelle, imaginando un futuro casi perfecto que nunca llegará. Cree que así roba sus sueños, para poder disfrutarlos él mismo en las solitarias noches frías del invierno.
También le gustan los pescadores, pero a ellos los devora por simple venganza.

viernes, 15 de enero de 2010

Estilo original

Un enorme huevo de pez fue arrastrado por la brava marea hasta una playa solitaria. Al sentir el calor del sol veraniego acariciando el cascarón, el pez supo que era el momento de nacer. Asomó su cabeza tímidamente y observó a una cangreja alegre que lo miraba con los ojos desorbitados.
- ¿Mamá? – preguntó el pececito.
- ¡Comida! – pensó la cangreja.
Sin embargo, al ver la mirada tierna y transparente del recién nacido, el crustáceo logró vencer su instinto y adoptarlo como si fuera un hijo de su propio vientre. Lo condujo a los empujones hasta las aguas de la costa y le enseño su nuevo hogar. Allí, el pez se sintió espléndido, como debe sentirse un pez en el agua. Y fue así que, gracias a la influencia de su madre de leche, el pequeño pez aprendió a nadar con  un original movimiento hacia atrás, inventando un nuevo estilo que los demás peces adoran imitar.


La foto "Entre el bien y el mal" es propiedad de Christian Pereira y se publica con autorización del autor, únicamente para su exhibición en este blog.  

lunes, 11 de enero de 2010

Esperando al Teté

Hacía años que la tribu esperaba la llegada del Teté. Los ancianos afirmaban que su advenimiento cambiaría radicalmente el destino de su pueblo, pero el transcurso del tiempo y la desidia en preservar las tradiciones, les impedían recordar las razones por las cuales sostenían tal teoría. Según especulaban los más sabios, sin fundamentos, el Teté podía ser un cacique milagroso, un maldito dictador sanguinario o algún ser monstruoso que condenara a sus familias al exterminio, entre otras cosas aún peores.
Una tarde, a la hora de la siesta, un indio cruzó a la carrera las estrechas calles de tierra del campamento, agitando sus brazos cubiertos por un colorido traje artesanal hecho de cañas y plumas de águila.
– ¡Soy el Teté! ¡Soy el Teté! – gritaba exultante.
Al llegar a la cima del monte que los protegía, el indio gritón abrió sus brazos y levantó vuelo velozmente. Desfiló planeando sobre las tiendas de la aldea, mientras saludaba eufórico a sus coterráneos, que lo observaban aterrados desde la superficie. Fue allí cuando el patriarca de la tribu, encargado de asegurar la protección de su gente, tensó su arco en dirección al hombre pájaro y, confundiéndolo con un animal endemoniado, lo bajó de un flechazo certero, en medio del pecho.
Algunos días después del funeral, los restantes miembros de la tribu lograron olvidar el asombroso episodio. Jamás sospecharían que, con la muerte del inventor del primer traje volador de la Historia, habían perdido la oportunidad de desarrollar una novedosa e increíble forma de defensa, que les hubiera permitido ganar, de manera definitiva, la desigual batalla contra el hombre blanco. A pesar de todo, los sucesores de aquellos sobrevivientes aún esperan, con sus ilusiones intactas, la llegada revolucionaria del Teté.

jueves, 7 de enero de 2010

Adorable hábito

Todos los jueves, cuando cae la tarde, la muchacha cruza el bosque, portando una canastita. El final siempre es el mismo: el salvaje lobo la espera, para devorarla de un bocado, en la alejada casita. La madre intranquila se pregunta por qué su hija cumple con tanto rigor la llamativa rutina, si hace más de quince años que se murió la abuelita.

lunes, 4 de enero de 2010

Dulce cebiche

Tras el inesperado naufragio, me encontré rodeado por cientos de individuos que, clamando por auxilio con desesperación, flotaban indefensos sobre las crueles aguas del océano. Como estas ocasiones ameritan, cada uno de nosotros buscó, como pudo, su propia supervivencia.
Una joven rubia fue la primera en verme nadar ávidamente contra la corriente, antes de sentir la afilada caricia de mis dientes contra su jugoso cuerpo.