viernes, 27 de noviembre de 2009

Cuestión de gustos

- Gustos son gustos - decía Zenobio mientras se revolcaba en el lodo con los chanchos.
Al ver la escena, la gallina celosa empezó a cacarear.
- No hay caso. Me peiné las plumas, pero el gaucho ni me mira.
Es que al hombre le gustaban más las costillitas que los huevos fritos.

27 comentarios:

Susi DelaTorre dijo...

Sí, todo el mundo tiene sus preferencias, a veces, incluso elegidas insconscientemente...

Un cuento cortísimo... con buen gusto, Martín!


Saludos!
Feliz Fin de Semana.

SIL dijo...

Con los antecedentes de Zenobio, me imagino la cara de odio de la oveja...
El que dijo que ¨en gustos no había nada escrito¨ es porque aún no vino a este living...
;D

Buenísimo, Martín.
Un beso enorme.

Lisandro dijo...

ajajaj... una carcajada se me salio de la nada!!! buenisimo Amigo... esta muy pero muy bueno!!!

Cam...¬¬¬ dijo...

Que feo estar en el lugar de la gallina....yo me estoy peinando las plumas para algún día ser su huevo frito!

Kutxi dijo...

Realmente muy bueno. Me gustó, valga la redundancia.

Abrazo grande,

Kutxi.

Solecito dijo...

Jejeje... Buenísimo, como todos!

Un abrazo


Víctor dijo...

Pues sintiéndolo mucho, Martín, este cuento no me acabó de convencer. Quizás es que has puesto el listón demasiado alto, y a veces cuesta superarlo, o quizás es que yo soy demasiado exigente, o quizás... Nada, que me toca esperar el siguiente.

Un abrazo, Martín.

mardelibertad dijo...

No me gustaria verme en la situación.
Besos

Elo dijo...

Definitivamente es cuestión de gusto visitarte! Un abrazo!

Anónimo dijo...

Muy bueno xD De hecho, pueden ser las costillitas o mil otras cosas del cerdo xD

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Rembrandt dijo...

Uy pobres chanchitos , hay amistades que matan, que la gallina mejor no se queje, no tiene idea de lo que zafó!

Besos y buen finde
REM

Netomancia dijo...

Martín, que irónico, el querer ser elegido para terminar en la mesa del hombre.
Muy bueno!

Felipe R. Avila dijo...

Excelente...

Natalia Astuácas dijo...

Martín amigo.
Ja, ja, ja y más ja.
Hoy me reí en el living.

Un fuerte abrazo, feliz inicio de semana.
Besos.

el marido de la portera dijo...

Coincidimos en el tema de los posts: Sobre gustos no hay nada escrito. Ojalá el mío haya resultado la mitad de bueno que el tuyo.

Un saludo.

Anónimo dijo...

Culpemos al colesterol y listo.

Saludos

Pd: a mi también me gusta revolvarme en el barro, pero después no lavo la ropa...

Martín Gardella dijo...

Lasosita, ya lo dice el refrán, sobre gustos no hay nada escrito. Gracias por tu comentario. Saludos

Sil, no me había puesto a pensar en la oveja. No es difícil imaginar su envidia e imposible no sonreir. Gracias por tu comentario. Un beso

Lisandro, que bueno que te haya gustado amigazo. Es un relato simple, pero creo que de indiscutible humor. Gracias por tus elogios. Un abrazo

Martín Gardella dijo...

..., bienvenido/a al Living! Nunca hay que perder las esperanzas de conquistar el gallinero. Espero que regreses pronto. Saludos

Kutxi, me alegra que te haya gustado, mal que le pese a la gallina. Un abrazo

Martín Gardella dijo...

Solecito, este relato no es de los más profundos, pero aún así me alegra que te haya gustado. Saludos!

Victor, debo confesar que hice trampa con este cuento. Es una mini que escribi hace más de dos años y ya estuvo publicada en el Living en sus comienzos. Como anduve medio complicado ultimamente, decidí volver a probar el gusto (de eso se trata) de mis lectores e imaginé algún comentario como el tuyo. Debo reconocer que me alegra saber que, con el paso del tiempo, he logrado elevar la varilla. Espero poder volverla a mantener. Gracias por tu comentario. Un abrazo

Martín Gardella dijo...

Mardelibertad, te referis a la del cerdo o a la gallina? No sé cual es mejor. Saludos!

Quimera, eso es bueno o malo? ajaja Un beso

Martín Gardella dijo...

lalagoesfishing, tenés razón! Claro que si. En eso también hay para todos los gustos! Saludos

Rembrandt, es cierto. La gallina aún no sabía cual era el destino del cerdo. Pero tampoco sabe que el sábado Zenobio querrá comer pollo. Gracias por tu comentario. Un beso

Martín Gardella dijo...

Netomancia, me alegra que hayas notado la ironía. Ese es el mensaje del relato que, aunque humorístico, busca mostrar las consecuencias inesperadas que puede tener una situación. Gracias por tu comentario! Un abrazo

Felipe, tu comentario es breve pero muy elogioso. Infinitas gracias. Un abrazo

Martín Gardella dijo...

Natalia, querida amiga, siempre es lindo saber que pude robar una sonrisa. Gracias por tu comentario. me alegra que te haya gustado. Un beso

Marido, salí corriendo a revisar el tuyo, y hablando de gustos, el tuyo me gustó mucho más. Gracias por tu visita. Un abrazo

Martín Gardella dijo...

Dragon, sobre esos gustos que confesás tampoco hay nada escrito. Simplemente procurá que no te confundan con un chancho. Un abrazo!

Rebeca Gonzalo dijo...

"Sobre gustos no hay nada escrito" al menos eso he oído siempre, ahora veo que no es así ja, ja. Un abrazo.

Martín Gardella dijo...

Sechat, es cierto. Aunque sea una minificción, ahora sí lo hay! Un abrazo