domingo, 20 de septiembre de 2009

Imperdonable

Ella no encontró razones para enojarse cuando su novio decidió invitar a su ex pareja a su ceremonia de casamiento, aunque sospechaba que algo extraño podría suceder. Por eso, no le sorprendió que la mujer entrara a la Iglesia vestida de blanco, extrajera un revólver de su cartera y, en medio de la celebración, vaciara el cargador en el cuerpo de quién iba a convertirse en su flamante esposo. A pesar de ello, no la juzga, es una mujer enferma, a la que pueden condonársele algunos actos de celosa locura.
Pero hay algo que la novia no será capaz de perdonar. Frente al espejo de la habitación vacía, observa entristecida su soñado vestido de novia, arruinado perpetuamente por las imborrables y espantosas gotas rojas, que siempre le recordarán su frustrado matrimonio.

Cuento presentado por el autor en el concurso Minificciones del mes de septiembre de 2009, inspirado en la imagen aquí incluida.

43 comentarios:

Anónimo dijo...

Patético que te suceda una cosa semejante, pero las obsesiones nos pueden conducir a cometer estas locuras.


Siempre te leo, soy un poco vaga para los comentarios.

Besos.

aapayés dijo...

Que decirte esos son celos.. a muerte..

Un abrazo
Saludos fraternos.

Romina E. dijo...

Duro... da dolor de panza el imaginarlo,
Gran redacción, que sea con exito!
beso grande!

El Vocero dijo...

Cuál de las dos más enferma...

Definitivamente te salen mucho mejor los cuentos como este, surrealistas y con final sorpresa ;)

Hace tiempo no te veo por casa...saludos.

La sonrisa de Hiperion dijo...

Yo ya no me perdono ni a mi mismo...
jajajaj

Saludos y buen inicio de semana.

Anónimo dijo...

aaah no!...y que se quede asi tan tranquila... JAMAS!.
la venganza es el mejor platillo en estos casos

ñaka, ñaka!!!

=0P

SALUDOS!

SIL dijo...

Las dos con obsesiones bien marcadas, e igualmente preocupantes.
No le habrá hecho un favor al novio, después de todo?, mandándolo al más allá?
Quizás lo salvó de una condena peor...
Compulsiones femeninas: siempre esconden terribles peligros.

Muy bueno, Martín, como siempre.
Un beso enorme.

Anónimo dijo...

Genial cuento e increíble tu capacidad para inspirarte en la imagen y componer una historia tan alucinante.
Enhorabuena Martín.
Un abrazo

Maga h dijo...

Pobre, no dejaron a la princesa que cumpla su sueño de casarse de blanco.

Sacrilegio!!

MAGAH

Lisandro dijo...

Las obseciones son peores que los celos... que buen texto... me encanta cuando hay sangre en ellos... un abrazo!

Mundo Animal. dijo...

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¡¡ QUE TENGAS UNA FELIZ SEMANA !!

Neogeminis Mónica Frau dijo...

uyyyy qué egoísta esa chica! ajajaja...se ve que del matrimonio solamente le importaba el vestido! ajajajaja...y de esas, que las hay, las hay! jejeje


Un abrazo!

Carina Felice, Photography dijo...

Totalmente de acuerdo con Neogeminis!
es mas, algunas SoLO POR ESO lo hacen!
jajajaaj!!!
despues llega Martin y escribe un cuento :)
Abrazos!

Rembrandt dijo...

Tres enfermos sin dudas. El sado masoquismo a full.
Cualquier parecido con la realidad ....puede ser posible.

Besos

Netomancia dijo...

Una mujer que queda triste, pero tan solo por no casarse.
Una mujer que seguramente quedará sola, en una cárcel.
Un tipo que se ha librado de dos egoístas, aunque el precio haya sido la muerte.
Un abrazo Martín y suerte con este relato en el concurso de Minificciones!

mara-mara dijo...

Una boda llena de emociones provocadas por multitud de sentimientos que... curiosamente... ninguno coincide con el amor, o tal vez si; pues desconocemos los que realmente latían bajo el corazón del desafortunado y malogrado novio.

Un cuento cortísimo pero muy intenso.

Besos.

Cloe dijo...

Las mujeres nos procupamos por cada cosa...

Abrazo

Anónimo dijo...

demasiado literal con la imagen, creo que se podría haber jugado un poco más con las metáforas

saludos martín, feliz primavera

Martín Gardella dijo...

JR, que bueno que hayas decidido salir del silencio! Coincido con vos, todas las obseciones son malas, y las consecuencias imprevistas! Un beso

Adolfo, parece que lo eran! Gracias por tu comentario. Un abrazo!

Romina, lamento haberte dado ese dolor de panza. Espero que pase pronto! ;) Gracias por tu aliento! Un beso

Martín Gardella dijo...

Vocero, definitivamente estos son también los que mas me gustan a mi. Volveré a visitarte. Gracias por tu comentario. Un abrazo!

Hiperión, me pregunto que habrás hecho que no merecés perdón. jaja Un abrazo

Sonia, me hiciste reir con tu comentario. Quizás la venganza llegue en una próxima boda. Ya lo veremos! Un beso

Martín Gardella dijo...

Sil, eso le pasó al novio por andar invitando a la ex! A quién se le ocurre? Gracias por tu comentario! Un beso

Luis, muchisimas gracias! Me alegra que te haya gustado la idea. Creo que la imagen da para muchas historias, solo intente analizarla desde un lugar diferente. Un abrazo

Magah, y lo peor es que se quedó con ganas de sacarse las fotos! Un beso

Martín Gardella dijo...

Lisandro, gracias por tu generoso comentario. Cada tanto hay sangre por acá, para que la disfrutes! Un abrazo

Mundo animal, igualmente para vos. Saludos

Neogeminis, parece que es como vos decis. Y la pobre se quedó sin nada! Gracias por tu comentario! Saludos

Martín Gardella dijo...

Carina, interesante el planteo que traes conjuntamente con Neogeminis. Me hace pensar si en esos casos no será más fácil comprarles un vestido blanco que prometer amor eterno! Gracias por tu comentario! Un beso

Rembrandt, coincido con vos. Cada uno de ellos tiene algo para analizar! Gracias por tu opinión! Un beso

Neto, gracias por tus buenos deseos. Creo, igual que vos, que los tres destinos han sido igual de tristes. Un abrazo

Martín Gardella dijo...

Mara-mara, imaginemos que el novio si se casaba por amor, sino toda esta historia no hubiera tenido sentido. Como ocurre muchas veces, los inocentes pagan por las locuras de los enfermos. Gracias por tu excelente comentario! Un beso

Cloe, parece que si! Quién se habrá ocupado del catering? Un beso

Galán, a pesar de haber participado varias veces de ese concurso (todas ellas, sin exito) no logré descubrir si realmente es importante adecuar el relato a la imagen o puede dar lugar a mayores metáforas. De todos modos, me gusta imaginar el relato sin la imagen, que solo sirve en este caso, para invitarme a escribir! Gracias por tu comentario. Saludos

Amapola Psicovisceral dijo...

mmm..el dripping en arte aún está de moda, quizá por ahí pudiera haberse escapado..jajaj

de toda sformas, me alegro por ella si ese detalle es loq eu má sle duele..pronto lo superará! ^^

besitoooos

Martín Gardella dijo...

Juls, que bueno que estes de regreso! Hace bastante que no te veía por acá. Creo que tenés razón. La tintorería será la mejor forma de superar el problema! Gracias por tu visita. Un beso

Unknown dijo...

Excelente blog! No lo conocía y es un placer.

Que tengas suerte en el concurso de Minificciones.

Saludos universitarios!

Martín Gardella dijo...

Manu, bienvenido al living! Me alegra que te haya gustado mi Living! Gracias por tu comentario y por seguirme! Saludos

Juan de la Cruz Olariaga dijo...

Intrigante, para leer y releer, de esos relatos donde uno puede sacar tantas conclusiones como le parezca. Muy bueno. Volveré y gracias por tu visita.

Anónimo dijo...

Ahora tendrá que volver a gastar en un traje nuevo y en balas. Tal y como van los precios de las cosas, mejor que en la próxima use cuchillo y un traje de buzo, que es lavable.

Martín Gardella dijo...

Juan de la Cruz, bienvenido al living! Eso es justamente lo que me gusta de las microficciones, que cada cual puede sacar la conclusión que le venga a la mente. Espero que regreses pronto. Muchas gracias por tu visita y tu comentario! Saludos

Paseante, bienvenido! Buena idea la que propones. Es una nueva versión del mismo relato, que bien vale una segunda parte! Gracias por tu comentario. Saludos

Anónimo dijo...

Sí, el final es sorprendente, aunque algunas comentaristas hayan opinado que las mujeres pueden preocuparse por el vestido en un caso así (y de hecho, sí, lo harían...), ¡me niego, me rehúso, a tal posibilidad! Ni en chiste, ni en joda, no cabe la broma (tristes rasgos de personalidad desnuda este cuento)... no hubiera querido un final así...por eso me sorprendí. Y porque puede ser...
Un beso, Martín, y, claro, ¡buena suerte en el concurso!!!!

Martín Gardella dijo...

Lauri, no quise insinuar que todas las mujeres sean así (tampoco lo pienso), pero hay de todo. También existen los hombres que se casan por conveniencia. Lo bueno es que, a pesar de la brevedad, te haya podido sorprender. Muchas gracias! Un beso

Natalia Astuácas dijo...

Wowwwwwwwwwwwww
Uyyyyyyyyyyyyy
Eso le pasó por no tomar TE antes...
Bueno eso creo yo...
Que fatal final...
Un abrazoTE Martín amigo, cuidaTE mucho, besos.

Magenta dijo...

Nunca se sabe con que loc@ histerico podamos llegar a parar!!!
Muy bueno tu blog, seguire pasandome por aca!
:o)

Víctor dijo...

Está bien, pero si me lo permites quizás esperaba más de ti, Martín. Nos tienes acostumbrados a relatos mejores. Y la imagen daba para mucho. Te sigo.

Saludos lelos!!!

Raúl dijo...

Y es que van carisimos los trajes de novia... como para tener que llevarlos, casi sin haberles dado uso, a la tintorería.
Saludos, Martín.

Martín Gardella dijo...

Natalia, ese TE seguramente hubiera cambiado el final. Gracias por tu visita y tu comentario! Un beso

Alma Magenta, bienvenida al living! Me alegra que te haya gustado mi blog. Espero que regreses pronto! Saludos

Martín Gardella dijo...

Víctor, es cierto que la imagen puede dar para mucho, para trate de darle un enfoque diferente. Sin dudas, siempre se puede hacer algo mejor. Gracias por tu opinión. Un abrazo

Raúl, y encima las tintorerías también son carísimas! Gracias por tu comentario! Un abrazo

HUMO dijo...

El límite de la locura, celos sangrientos!

siempre sorprendes!

=) HUMO

Martín Gardella dijo...

Humo, hay locuras que no tienen límite! Gracias por tu comentario! Un beso

Clara dijo...

Este mes nos hemos vuelto todos unos asesinos, ja,ja...

Un abrazo,

Martín Gardella dijo...

Clara, hay cónyuges sangrando en todos los blogs! jaja Un abrazo