martes, 2 de junio de 2009

Una vida de película

Apenas transcurridos cinco minutos, Arturo se sintió identificado con el protagonista de la película, no sólo porque era físicamente muy parecido, sino porque todas las cosas que le sucedían al actor, le habían ocurrido antes a él. Luego, descubrió que la historia que mostraba la pantalla era un plagio de su vida, contada resumidamente, a razón de un año por minuto.
La mitad del film lo mostró en su etapa actual, con los sinsabores de haber vivido y la ansiedad por saber lo que vendrá. A partir de allí, pudo verse en el futuro, a través de las escenas representadas en el celuloide por aquel sujeto análogo, que envejecía igual que él.
Después del dramático final, el cerrado aplauso de los espectadores premió la exquisitez de aquella obra cinematográfica de apenas sesenta y cinco minutos. Mientras tanto, en un rincón oscuro de la sala, un acomodador intentaba consolar al desanimado Arturo que, junto con la incertidumbre acerca de su vida pendiente y de su muerte, acababa de perder la vergüenza de llorar en público.

47 comentarios:

Netomancia dijo...

Debe resultar chocante encontrarse con la vida de uno en la pantalla grande. Más, no sabiéndolo de antemano.
Me gusto mucho Martín, de esos relatos improbables que cargan tanta magia y encanto que es probable que algún día se hagan realidad.

SIL dijo...

Magnífico Martín..cualquiera hubiera llorado en público, tras semejante hallazgo.
GENIAL y más.
BESOS de living (antes de que termine la peli)

Mercedes Pajarón dijo...

...Precisamente por esta razón hace tiempo que no voy al cine!

Un poco inquietante... como a mí me gusta!

Un saludo!

Neogeminis Mónica Frau dijo...

mmmmmmmmmm...qué suerte es que nadie puede tener la certeza de cuánto durará ni cómo será su futuro...de otra manera habría llorones en todos los rincones! jejeje

Muy bueno, como ya es habitual!

un abrazo!

Anónimo dijo...

Muy bueno, y es cierto que a veces uno se identifica tanto con ciertos personajes en las pelis que sales hasta llorando.
Un beso.

. dijo...

Eso es lo que yo llamo vivr el argumento de una peli... pero qué agobio, madre.

una más... dijo...

Mis dudas y yo.. No es posible cambiar o evitar algo que ya sabes de ante mano?
Bss..
De todas formas no me gustaría ver una peli asi..

Víctor dijo...

Muy bueno, Martín. Nuestras vidas ya están escritas, o filmadas en 8 milímetros. Me recordó uno que escribí hace tiempo. Si tienes dos minutos, pásate:

http://realidadesparalelos.blogspot.com/2009/04/bookcroosing.html

Saludos lelos!

aapayés dijo...

Excelente , siempre es un gusto inmenso leerte..
hagamos que nuestras vidas sean de películas todos los días

saludos fraternos
un abrazo

Carina Felice, Photography dijo...

Me invita a pensar que el pobre Arturo sintio de repente que habia sido observado toda su vida, como The Truman Show.
Como para no llorar en publico... ademas.
Saludos!

Romina E. dijo...

Excelente... qué momento, ver pasar delante neustro cada una de nuestras elecciones, como para no entregarse al mar de lagrimas...
besos!

Alejandro Ramírez Giraldo dijo...

Si le director era Tarantino tenía todo el derecho a llorar.

David Moreno dijo...

Qué bueno! sigo creyendo que representamos un papel de una película o de un teatro, se nos repartió un papel que desempeñar y no tenemos escapatoria... ¡qué pena que a mí no me tocara el de emperador romano!

Martín Gardella dijo...

Netomancia, creo que no habría película más terrorífica que esa. Gracias por comentar! Un abrazo

Sil, debe ser duro contener las lágrimas si somos testigos de nuestra propia muerte. Gracias! Besos de living

Mercedes, quizás podés optar por una buena comedia! Saludos

Neogeminis, sería terrible que todos tuvieramos una película así, no? Gracias por tus elogios, saludos.

Eva-lazarzamora, en este caso fue al revés, quién se identificó con el espectador fue el protagonista! Gracias por tu visita. Un beso

Orologiaio, coincido con tu comentario, es agobiante! me alegra ver que ya sos habitué del living! Muchas gracias. Un abrazo

Una más, tengo las mismas dudas. Creo que tampoco me gustaría ver una película así, por eso, en este caso, no escribí en primera persona. Un beso

Martín Gardella dijo...

Victor, pasé a leer tu cuento y tenes razón, tiene muchos "paralelos" con este, solo que en vez de una película, se trata de un libro. Me gustó mucho. Gracias por compartirlo acá. Un abrazo

Adolfo, una cosa es vivir la vida de película, y otra muy distinta es que alguien la filme antes de que la vivamos, no te parece? Un abrazo, y gracias, como siempre.

Carina, muy buena tu analogía con Truman Show, aunque en este caso sería al revés, ya está todo filmado, no hay nada que podamos inventar para cambiarlo. Gracias por tu visita. Un beso

Romina, imagino que debe ser difícil no echarse a llorar. Gracias por tu comentario. Un beso

Alejandro, tenés razón! Tarantino lo debe haber hecho sangrar bastante! jaja Un abrazo

No comments, nunca sabemos que papel nos puede tocar. Hasta el día de la muerte, el guionista puede decidir algo distinto para nosotros. No pierdas las esperanzas! Saludos

Taller Literario Kapasulino dijo...

Muy bueno! Muy original!
Que nunca nos pase eso!

ana dijo...

Holaaaaaaa.

Si me pasa a mi, el acomodador me tiene que recoger del suelo.

Me encantan tus historias.

Un besito muy fuerteeeeeee.

≈♦ Mi Sentir ♦≈ dijo...

(¯`°v°´¯)_
_(_.^._)__
♥ Buenas tardes como estas hoy ? deseo que todo muy bien , pase a leerte y a dejarte un fuerte abrazo con cariño deseandote una linda tarde -).. Estrella...♥

Annie dijo...

Si hubiera sido yo,
me hubiera esfumado
en los primeros 5 min....
Por las dudas !! Vió? Jé!

Vivir sabiendo el futuro?
UN ESPANTO!

Besotes!

Annie dijo...

P.D.: (QuÉ colgada de la palmera que soy!)

EL CUENTO ME ENCANTÓ...

Annie dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
febade dijo...

"Después del dramático final, el cerrado aplauso de los espectadores premió la exquisitez de aquella obra cinematográfica de apenas sesenta y cinco minutos"

Todo un descubrimiento para mi tu blog. Me gusta él angulo por donde cuelas tus palabras.

Un saludo

Dolores dijo...

Hola Martin ^_^

Creo que me vas a tener por asidua lectora de tu blog.

Excelente cuento.

Un saludo amigo.

Eva dijo...

Ayy el cine, creo que todos nos hemos visto reflejados en alguna escena de pelicula, a veces sirve de catalizador para sacar emociones que creemos tener controladas...que dífil es llorar a gusto en un cine :-)

Me gustan tus relatos,los mini y los maxi.

Martín Gardella dijo...

Carla, coincido con vos, ojala nunca nos pase. Sino, me iré a la mitad de la película. Gracias. Saludos

Ana, eso dependerá de lo que te muestre la película. Me alegra que te haya gustado. Un beso.

Estrellita, bienvenida al Living! Gracias por tu saludo! Volvé cuando quieras. Un abrazo

Annie, que bueno que te haya gustado el cuento. Si, lo dije más arriba, yo también me hubiera ido antes de terminar... o no? No se! ja Gracias por tus comentarios. Un beso

Febade, me alegra que te sientas a gusto en el living y que lo disfrutes. Te agradezco mucho tus comentarios. Un abrazo

Mandy, será un placer tenerte por acá seguido. Las puertas están abiertas siempre. Gracias por tu comentario. Saludos

Max, bienvenido al living! Coincido con vos, nunca me gustó llorar en el cine.. Me alegra que te hayan gustado mis cuentos. Volvé cuando quieras. Saludos

Habitaciones rojas, pensamientos negros dijo...

Hablando de vida de película, tú cuento cortísimo sería un buen argumento para una película.

Besos rojos Martín,
HR.

Anónimo dijo...

Querido amigo Martín, en el relato de hoy abres las puertas de la duda entre lo real y lo inventado, lo que se está viviendo en el presente y lo que nos queda por averiguar de nuestra vida.
Un texto para la reflexión.
PAZ

Clara dijo...

Así es nuestra vida... un espectáculo para los demás.
Un beso,

Isady dijo...

Me encantan las películas¡¡¡¡¡ no solo por su narrativa, sino que es toda expresión en esencia, las escenas te envuelven y en pocos minutos te encuentras dentro de una batalla campal o en una pesecucion a mano armada...jeje y la emoción a grito pelado.

Es inevitable no relacionar tu vida con una de ellas..

Saludos¡¡¡¡ Un beso.

Raúl dijo...

Esto es de una pesadilla más terrible, que la de las Navidades Futuras, de Cuento de Navidad.

martin dijo...

pase.lei y sali.Un abrazo tocayo.

Nancy dijo...

En pocas palabras, qué digo pocas, en una palabra: FAN-TÁS-TI-CO

Martín Gardella dijo...

HR, sería una especie de película sobre una película! Original idea! Un beso

Luis, muchas veces se dispara la reflexión sin buscarla. Me alegra que en vos haya tenido ese efecto. Un abrazo querido amigo.

Clara, coincido con lo que decís. De alguna manera todo lo que hacemos es visto por los demás. Un beso

Isady, en este caso no solo hubo identificación, sino vivencia! Gracias por tu comentario. Un beso

Raúl, coincido con vos en que se trata de una pesadilla. Saludos!

Martin, tocayo, lei y contesté. Un abrazo!

Nancy, un microcomentario! jaja Gracias por tu apoyo. Un beso

HUMO dijo...

Sos un placer!
en un momento pensé que el acomodador intentaba hacer raccionar al muerto, menos mal! jajaja, conociéndote.

cariños!

=) HUMO

Amapola Psicovisceral dijo...

De pequeña hubiera firmado por saber paso a paso mi futuro.
Ahora creo que eso me condicionaría, ya no lo tengo tan claro.

muchos besoooos!!!!!!!!!!!!

Martín Gardella dijo...

HUMO, hubiera sido otro final posible, que por un momento pensé. No estuviste lejos. Un beso

Juls, coincido con lo que decis. Yo de chico tambien tenía intriga, hoy, en cambio, prefiero vivir con la incertidumbre de la vida. Un beso

Ana Frank dijo...

Tal vez por eso se dice que somos los actores de una gran obra, que es la vida. Debe ser chocante verla en pantalla grande, frente a tantos que creen ser críticos y hablan sin saber, sin tener protagonismo alguno en ninguna escena. Magnífico escrito :) Bien por Arturo, que supo llorar y verse.

Rous dijo...

Como Dorian Grey de Wilde!
terrible

cosasimpropias dijo...

sublime y breve. prometo mas visitas

Martín Gardella dijo...

Ana Frank, bienvenida al living! estoy totalmente de acuerdo con tu opinión, y también felicito a Arturo por tener el coraje de aguantar la película hasta el final. Gracias por tu visita. Volvé cuando quieras. Saludos

Rous, divertida tu analogía! Gracias por pasar. Un beso

Cosasimpropias, bienvenida al living! Se que llegaste desde el blog de Ignacio. Gracias por venir a visitar. Espero que regreses y que te guste este espacio. Saludos

Anónimo dijo...

No sé si me atrevería a ver mi propio film, tal vez pagaría la entrada y me iría antes de terminar los pochoclos. Me puse a pensar en qué rubro pordría encasillarse. Pero creo que todavía no existe ese en el mercado.
Excelente relato. No dejo de asombrarme cómo conseguís crear un Universo con tan pocas palabras. Por eso no dejo de admirar semejante talento.

Muchos cariños.

Anónimo dijo...

Me refiero a mi propia película no, a la de mi vida, a ese género que no podría definir con una sola palabra.
Estoy en esos días en que no me explico muy bien jaja.
Ahora sí me levanto del sillón, aunque me quedaría horas en este living, hay que trabajar.
Besos nuevamente.

Martín Gardella dijo...

Naty, gracias por tu comentario. Quedate tranquila que se entendió bien tu comentario! Elliving queda abierto, así volvés cuando quieras. Un beso

Anónimo dijo...

Éste es, simplemente, genial.

Martín Gardella dijo...

Gracias lalagoesfishing! Me alegra que te haya gustado. Saludos

mara-mara dijo...

Qué doble final tan intenso! Durante casi todo el relato he estado en tu sillón leyendo con los dedos cruzados más preocupada, esta vez, del pobre Arturo; porque intuía que el final sería de esos que te dejan sin respirar... y efectivamente! nada mas terrible que tener que vivir sabiendo que lo que está por venir es tan doloroso, que mirándolo desde la situación del protagonista, la vergüenza de que te vean llorar se hace casi hasta irrisoria.

Excelente relato y magnífico final.

No tienes que darme las gracias por comentar estos relatos, que tú dices que son viejos, para mí tienen una frescura indesccriptible. Soy yo la que se siente agradecida porque hayas decidido dejárlos aqui y yo pueda venir a leerlos cómodamente.

Besos siempre!!

Martín Gardella dijo...

Gracias Mara-mara, me alegra que te sientas a gusto por aquí y que te gusten mis relatos. Un beso