miércoles, 8 de junio de 2011

El show debe continuar

Lo crucificaron diez veces. Y él resucitó otras tantas. Pero un día el gobierno decidió suspender esas ejecuciones inútiles, alegando problemas de presupuesto.
Ante semejante decepción, el resucitado debió buscar nuevos métodos que extendieran su calvario. Desde hace años, solicita que lo claven en la cruz hasta morir, para volver a la vida algunos días después. 
Sus seguidores todavía se sorprenden con el milagro. Es la atracción más aplaudida en el circo itinerante.

21 comentarios:

Esteban Dublín dijo...

Entonces, que continúe el show.

luis dijo...

Pues yo creo que deberían acabar con este festival de despropósitos.
Un buen micro amigo.
Saludos

Unknown dijo...

Digo yo, y es un decir, que si en vez de crucificarlo le cortasen la cabeza directamente, no sería más práctico y evitaríamos el volver cada año a lo mismo. Eso sí, -aunque sea con otro nombre- conservar las vacaciones.
Saludos, y un abrazo.

Netomancia dijo...

Un inmortal aburrido! Muy bueno Martín!
Un abrazo.

David Moreno dijo...

Si es que la gente se enganchan a cualquier cosa, jajaja

Un saludo indio

manuespada dijo...

Muy bueno, veo una crítica soterrada a la religión. Por cierto, me lo estoy pasando muy bien con tu libro, Martín.

Maite dijo...

Muy bueno Martín, fina ironía que deja al descubierto ciertos "fallos" más humanos que divinos. Un abrazo.

Unknown dijo...

Los tiempos cambian, debería plantearse hacer algo más espectacular que una simple resurrección, no sé, multiplicar monedas y fajos de billetes quizás.

Daniel Sánchez dijo...

Muy bien trabajado ese final y un argumento que ya engancha por sí solo.

Lucía dijo...

El milagro es que siga sorprendiendo a alguien. A mí me parece un poco peliculero, jajaja.

Besos

HUMO dijo...

Cada loco con su tema :)

=) HUMO

Raúl dijo...

Yo pagaría por verlo. Sí señor.

V de Tierra dijo...

es un exito juntar al resucitado masoquista y al publico sadico. A donde hay que ir a verlo a este señor??

Martín Gardella dijo...

Esteban, así será querido amigo.. Un abrazo

Luis, pretendes acabar con un negocio tan maravilloso? mmm... Un abrazo a la distancia

Martín Gardella dijo...

Carlos, son justamente esas vacaciones en las que el público aprovecha para ir al circo. Pero si siguieramos tu método, ¿quién sabe que pasaría? Me dejas pensando. Gracias. Un abrazo

Neto, para él es aburrido. Para el público es espectacular! jaja
Un abrazo

Martín Gardella dijo...

No comments, en eso consiste el negocio del circo. jaja Hace rato que no te veía por acá. Gracias por pasar y comentar. Saludos

Manu, me alegra que estés disfrutando mi libro, ya que yo disfruté muchísimo del tuyo. Puede ser que haya una crítica subliminal a la religión, pero cualquier semejanza con la realidad es pura coincidencia. Un abrazo!

Martín Gardella dijo...

Maite, muchas gracias. Sí, creo que tiene mucho de ironía y de crítica a nuestra naturaleza humana. Me alegra que te haya gustado. Un beso

El hereje, ese truco también lo hace. De día, trabaja en el banco de la ciudad. Buen aporte! Gracias! Saludos

Martín Gardella dijo...

Daniel, muchas gracias por tu comentario. Me alegra que te haya gustado. Un abrazo

Lucía, eso es porque no lo viste en vivo y en directo! jaja Gracias por tu comentario. Saludos

Martín Gardella dijo...

Humo, ¿quién es el loco? El artista circense o el espectador? Ahora me dejas pensando. Gracias por pasar. Un beso

Raúl, yo también!
Una alegría volverte a ver por acá. Muchas gracias! Saludos

V de Tierra, sin dudas que es un éxito. Próximamente en el circo más cercano de tu barrio. Saludos!

SIL dijo...

Los católicos cristianos muy creyentes, hacen lo mismo cada día.

Me ha gustado muchísimo, y más aún por esa doble lectura que le di.

Perdoname si derrapé acá.

Otro beso

SIL

Martín Gardella dijo...

Sil, me gustan los micros que invitan a distintas interpretaciones. Gracias por compartir la tuya. Un beso