Nuestra vida depende de la aleatoriedad propia del resultado de una corta y multitudinaria carrera, en la que, invariablemente, no resulta ganador el competidor más virtuoso, sino aquél que logra alcanzar, en menor tiempo, la meta del óvulo.
El màs listo llega antes, a veces con una rosa, el ôvulo se derrite y le deja pasar a él entre los millares de otros brutos que lo intentan por la fuerza y van derechitos a estrellarse contra el muro. Es cuestiôn de buen gusto y de saber hacer... como en todo(sonrîo).
Carina, ¿Sabés que pensé la misma pregunta? Pero como no estoy seguro de la respuesta, prefiero invitar a todos los lectores a la reflexión. Me alegra que te haya gustado. Un beso.
Netomancia, exactamente. Algunos tienen la suerte que además de veloz, el espermatozoide tiene varias otras virtudes. Un abrazo
Eva-lazarzamora, otra versión para una misma historia! Ahora sonrío yo. Muchas gracias! Un beso
Magah, gracias por tu comentario, siempre tan generoso. El gusto es mío de tenerte por acá. Un beso
Ana, a veces me cuesta creer que no sea el óvulo el que elija al ganador. Un beso
Marido de la portera, interesante reflexión nos dejás para pensar. La carrera no acaba nunca. Un abrazo
Alejandro, el único problema es que solo el ganador quedará con vida. Los otros morirán al poco tiempo. En ese caso, me pregunto que será de sus medallas. Un abrazo
jajaja me hizo acordar a la peli de Woody Allen, en la que aparece como esperma, y su cara de angustia! Qué angustia tener que ser el primero para sobrevivir!!
Y yo coincido con Carina, ya que hay libre albedrío...en este tipo de competición, el que llegó, es el más veloz y el más virtuoso. BESOS de living (a toda carrera)
Me has hecho sonreir.Casi me despistas..., crei que esa carrera no tenía nada que ver conmigo, pero mira, es alentador saber que al menos en una ocasión una parte de mí destacó de entre la multitud y pude salir finalmente ganadora!
Martín!!nuevamente me sorprendiste en el final. Y es que creo que precisamente la vida es una lucha desde el mismísimo comienzo. Tu cuento me hizo pensar en la complementariedad absoluta entre el hombre y la mujer, e imaginé cómo se reconocen mágicamente uno al otro, uniéndose para dar vida. Me trasladé al esa unión perfecta, y pensando en quien decide, si ÉL o ELLA, como se plantea a manera de discusión entre los comentarios de esta entrada, y digo, son los DOS, como será después, a lo largo de la vida. ÉL lucha para conseguirla, y ELLA permite que el la tome. Me parece que otra vez volé un poco. Pero es así, eso me pasa cuando te leo. Un beso grande!
Mara-mara, a todos nos pasó, inevitablemente. Que bueno es sacarte una sonrisa! Te mando un beso
Brotestertor, creo que ambos tienen razón también, pero eso ocurre en la vida, y no solo en el cuento! Gracias por tu visita y por comentar. Un abrazo
Naty, gracias por dejarte volar en el Living. Tus comentarios siempre son aportes muy valiosos para el debate y la reflexión. No tengo dudas de que existe ese complemento al que te referís, en todos los ámbitos de la vida, no solo en la concepción. Muchas gracias! Un beso grande
Pues sí, la competición empieza bien pronto...y es continua. Pero mientras lo expliques a tu genial manera, aquí estaremos en el living, tan a gusto! Un saludo!
Tu post me hizo recordad a la fascinante teoría del caos basada en el efecto mariposa, Martín. La impreceptible brisa provocada por el aleteo de una mariposa en una remota parte del planeta provoca un cambio climático tan importa en otro punto que modifica caóticamente un evento antes predescible. Esto es una metáfora de nosotros mismos : somos la misma persona que hace diez años, sin embargo hace diez años estábamos formados por unos átomos diferentes y psicológicamente también somos diferentes. (Comenté también tu otra entrada a modo de presentación) Besos de mariposa. ♥♥♥
Ingeniosa vuelta le encontraste al asunto. Pocas palabras, precisas y con un mar de interpretaciones. Si la meta es el óvulo, la carrera es a muerte... Besotes, me encantó encontrarte.
Excelente forma de describir en breves palabras nuestro origen como cuerpo... Lo que no es cuestión de virtud sino sólo de alcanzar la meta (del óvulo). Cruel carrera por correr, no?
para todos esos opinólogos que se la pasan escribiendo sobre las malditas y triladas cosas simples y deatlles cursis sobre los que dependen nuestra "vida"
A mis sesenta y algún años, todavía me parece increíble que tanto dependa de tan poco. Es cierto que una carrera, una lucha entre muchos por crear algo tan grande como una vida, dependa al final de la velocidad y del tesón de algo tan pequeño. Y me refiero también al acto por el que comienza la carrera. Desde luego no al sentimiento. PAZ
Posteriormente y a lo largo de toda la vida se repetira la condiciòn: el màs apto y fuerte logra el objetivo.
ResponderEliminarCasi una moraleja, un abrazo.
Gracias tocayo por tu comentario. Me alegra que te lleves esa moraleja. Un abrazo
ResponderEliminarpero lograr alcanzar en menor tiempo la meta del ovulo, no lo convierte ya en un virtuoso? Una tautologia!
ResponderEliminarme encanto!
un abrazo!
Esa es la razón por la que sale cada uno jajaja.
ResponderEliminarUn abrazo Martín, ahora me pongo al día con tus escritos.
El màs listo llega antes, a veces con una rosa, el ôvulo se derrite y le deja pasar a él entre los millares de otros brutos que lo intentan por la fuerza y van derechitos a estrellarse contra el muro.
ResponderEliminarEs cuestiôn de buen gusto y de saber hacer... como en todo(sonrîo).
Un abrazo y que tengas un lindo fin de semana.
Destacada publicación!! ja ja y parecía otra cosa.
ResponderEliminarBreve, concreto y finalmente sorprende.
Que capacidad de sintisis. Que virtuoso ahorro de palabras!
Siempre me gusta leerte, te felicito.
Magah
Ja ja ja ja ja ja ja.
ResponderEliminarPues a veces sí que es así, por no decir que la mayoría. Pero si se va hay que ir a por el ovulo entero, enterito ja ja ja ja ja jaj a
Un besito feliz fin de semanaaaa.
A mi modo de ver la diferencia es que fuera del seno materno, el que llega no es el más rápido o fuerte, sino el que mejor sabe pisar a los demás.
ResponderEliminarUn saludo.
Me los imagino en el podio: el ganador abrazando el óvulo y los dos perdedores cabizbajos esperando la medalla de plata y bronce.
ResponderEliminarUn saludo.
Carina, ¿Sabés que pensé la misma pregunta? Pero como no estoy seguro de la respuesta, prefiero invitar a todos los lectores a la reflexión. Me alegra que te haya gustado. Un beso.
ResponderEliminarNetomancia, exactamente. Algunos tienen la suerte que además de veloz, el espermatozoide tiene varias otras virtudes. Un abrazo
Eva-lazarzamora, otra versión para una misma historia! Ahora sonrío yo. Muchas gracias! Un beso
Magah, gracias por tu comentario, siempre tan generoso. El gusto es mío de tenerte por acá. Un beso
Ana, a veces me cuesta creer que no sea el óvulo el que elija al ganador. Un beso
Marido de la portera, interesante reflexión nos dejás para pensar. La carrera no acaba nunca. Un abrazo
Alejandro, el único problema es que solo el ganador quedará con vida. Los otros morirán al poco tiempo. En ese caso, me pregunto que será de sus medallas. Un abrazo
Me gustó Martín. Conseguiste engañarme: me hiciste pensar en el camino de la vida y sus baches cuando ésta ni siquiera había comenzado.
ResponderEliminarSaludos lelos!
Caí como Víctor, mm, sabes engañarnos perfectamente eh? Muy bueno Martín, un beso grande, gracias por tus palabras y tu presencia en mi casa.
ResponderEliminarjajaja me hizo acordar a la peli de Woody Allen, en la que aparece como esperma, y su cara de angustia! Qué angustia tener que ser el primero para sobrevivir!!
ResponderEliminarVictor, la vida también es una carrera, pero mucho más larga. Un abrazo
ResponderEliminarAndrea, no quise engañarlos! jaja Gracias por tu comentario. Un beso
Adriana, Si! Me acuerdo esta película, angustiante vida la del espermatozoide. Un beso
El relato es para aplausos.
ResponderEliminarY yo coincido con Carina, ya que hay libre albedrío...en este tipo de competición, el que llegó, es el más veloz y el más virtuoso.
BESOS de living (a toda carrera)
Sil, muchas gracias. Por relación transitiva, coincido con vos y con Carina. Besos.
ResponderEliminary no es el más virtuoso, el que hace mejor loq ue tiene que hacer? ;)
ResponderEliminarbesitos...
Juls, creo que esa es la opinión de la mayoría, e incluso la mía. Un beso!
ResponderEliminar¡Qué bueno, Martín! Me sorprendiste gratamente. Te salió en pocas palabras un artículo excelente.
ResponderEliminarAbrazo
Yo no sé si soy espermatozoide o no, pero veo óvulos por todas partes, óvulos que alcanzar y lo peor es que no lo consigo...ayssssss
ResponderEliminarjejeje
Excelente, asi si más.
ResponderEliminarBesos.
Juaz juaz juaz, debo ser sincera al decir que tus finales siempre me sorprenden, ja ja ja.
ResponderEliminarCuidate mucho amigo, un beso y un fuerte y cálido abrazo para vos.
Besos.
¿Se llevan el premio los más rápidos?????mmmmmmmmm....creo que no es así en todo! jajaajaja
ResponderEliminarUn abrazo!
estoy muy deacuerdo contigo, tienes toda la razon, el mas abil siempre sera el ganador.
ResponderEliminarme gustaria que pasaras por mi blog, y me digas que te parece
Oso, muchas gracias por tu comentario. Me alegra haberte sorprendido. Gracias por seguirme! Un abrazo
ResponderEliminarNo comments, me dio mucha risa tu comentario. Quizás solo es cuestión de correr más rápido! Un abrazo
Cecy, muchas gracias por tu visita y por comentar! Un beso
Natalia, siempre intento sorprender en el final, no siempre me sale! Un beso y abrazo para vos también.
Neogeminis, sin dudas que no es así en todo, pero en esta carrera, no me caben dudas! Un abrazo
Muy bueno como siempre. la vida, muy bien expresada en la carrera de la esencia.. vida..
ResponderEliminarte dejo mis saludos fraternos
un abrazo
Na3rol, bienvenido al Living! Me alegra que estemos de acuerdo. Prometo devolverte la visita! Saludos
ResponderEliminarAdolfo, me alegra que lo hayas disfrutado. Siempre es un placer recibir tus elogios! Te mando un abrazo.
ResponderEliminarMe has hecho sonreir.Casi me despistas..., crei que esa carrera no tenía nada que ver conmigo, pero mira, es alentador saber que al menos en una ocasión una parte de mí destacó de entre la multitud y pude salir finalmente ganadora!
ResponderEliminarSigo sonriendo...
La conclusión a la que ha llegado tu tocayo (el del primer comentario), lleva gran parte de razón. Juntemos eso con el dinero y... xD
ResponderEliminarMartín!!nuevamente me sorprendiste en el final. Y es que creo que precisamente la vida es una lucha desde el mismísimo comienzo. Tu cuento me hizo pensar en la complementariedad absoluta entre el hombre y la mujer, e imaginé cómo se reconocen mágicamente uno al otro, uniéndose para dar vida. Me trasladé al esa unión perfecta, y pensando en quien decide, si ÉL o ELLA, como se plantea a manera de discusión entre los comentarios de esta entrada, y digo, son los DOS, como será después, a lo largo de la vida. ÉL lucha para conseguirla, y ELLA permite que el la tome.
ResponderEliminarMe parece que otra vez volé un poco. Pero es así, eso me pasa cuando te leo.
Un beso grande!
Mara-mara, a todos nos pasó, inevitablemente. Que bueno es sacarte una sonrisa! Te mando un beso
ResponderEliminarBrotestertor, creo que ambos tienen razón también, pero eso ocurre en la vida, y no solo en el cuento! Gracias por tu visita y por comentar. Un abrazo
Naty, gracias por dejarte volar en el Living. Tus comentarios siempre son aportes muy valiosos para el debate y la reflexión. No tengo dudas de que existe ese complemento al que te referís, en todos los ámbitos de la vida, no solo en la concepción. Muchas gracias! Un beso grande
Muy bueno, necesite leerlo dos veces ;oP
ResponderEliminarGenial!
Besos
Romina, yo tambien necesite leerlo varias veces cuando lo escribí. jaja Gracias por tu comentario. Besos
ResponderEliminarPues sí, la competición empieza bien pronto...y es continua. Pero mientras lo expliques a tu genial manera, aquí estaremos en el living, tan a gusto!
ResponderEliminarUn saludo!
Mercedes, el gusto es siempre mío, de tenerlos por aca. Un saludo para vos también! Gracias.
ResponderEliminartu blog tambien esta bueno y me siento especial al ser tu seguidor numero 100...
ResponderEliminarUn saludito.
Tu post me hizo recordad a la fascinante teoría del caos basada en el efecto mariposa, Martín.
ResponderEliminarLa impreceptible brisa provocada por el aleteo de una mariposa en una remota parte del planeta provoca un cambio climático tan importa en otro punto que modifica caóticamente un evento antes predescible.
Esto es una metáfora de nosotros mismos : somos la misma persona que hace diez años, sin embargo hace diez años estábamos formados por unos átomos diferentes y psicológicamente también somos diferentes.
(Comenté también tu otra entrada a modo de presentación)
Besos de mariposa.
♥♥♥
En la carrera de la vida siempre gana la parca, que no espera en la meta, tomándose algo frío, cuando ya nosotros venimos exhaustos...
ResponderEliminarsaludos!
Ingeniosa vuelta le encontraste al asunto. Pocas palabras, precisas y con un mar de interpretaciones.
ResponderEliminarSi la meta es el óvulo, la carrera es a muerte...
Besotes, me encantó encontrarte.
Excelente forma de describir en breves palabras nuestro origen como cuerpo... Lo que no es cuestión de virtud sino sólo de alcanzar la meta (del óvulo). Cruel carrera por correr, no?
ResponderEliminarBesos rojos,
HR.
Martín, así es la vida... desde primera hora... una competición.
ResponderEliminarExcelente!
Un beso,
Manolinvicio, bienvenido al Living seguidor Nº100!! Muchas gracias por tu visita y por seguirme. Un abrazo
ResponderEliminarLoli, excelente analogía con la mariposa.Besos de bienvenida.
Hiperión, esa es otra carrera, más larga, y la última. Un abrazo
Liliana, bienvenida al Living! Muy buena interpretación de la historia. Espero que vuelvas pronto. Un beso
HR, sin dudas es cruel la carrera, pero inevitable. Gracias por tu comentario. Un beso
Clara, así es, nacemos por una carrera, y nunca paramos de correr. Gracias por tu comentario tan generoso. Besos
nada más simple y cierto, mi estimado
ResponderEliminarpara todos esos opinólogos que se la pasan escribiendo sobre las malditas y triladas cosas simples y deatlles cursis sobre los que dependen nuestra "vida"
saludos!
La antesala del milagro, Martín... lindo post!
ResponderEliminarme gusta mucho el giro diferente que le das a tus historias... son un toque personal de ti...
ResponderEliminarExcelente narracion¡¡¡¡
Saludos cuidate¡¡¡
Martín, con todo el respeto y a diferencia de tus lectores, este cuento me ha parecido facilista.
ResponderEliminarSi me lo permites, te pido que no te dejes llevar por la euforia colectiva.
El talento te sobra y tienes todo para escribir cuentos más elaborados que este.
Un abrazo sincero y crítico.
A mis sesenta y algún años, todavía me parece increíble que tanto dependa de tan poco.
ResponderEliminarEs cierto que una carrera, una lucha entre muchos por crear algo tan grande como una vida, dependa al final de la velocidad y del tesón de algo tan pequeño.
Y me refiero también al acto por el que comienza la carrera.
Desde luego no al sentimiento.
PAZ
Lo cual nos hace triunfadores por el simple hecho de existir.
ResponderEliminarGalán, así es. Es una visión simple del origen de cada uno de nosotros. Gracias, un abrazo.
ResponderEliminarRous, gracias por tu comentario! Saludos
Isady, es cierto. Trato de darle un giro al final.. me parece divertido. Muchas gracias por tu comentario. Un beso
Esteban, las críticas, al igual que los elogios, son siempre bienvenidos, e igual de subjetivos. Gracias por tu opinión. Saludos
Luis, me encantó tu comentario. Muchas gracias. Gran aporte para este living! Saludos
Orologiaio, tenés razón. Somos la evolución directa del ganador de esa carrera. Un abrazo.
soy una de las ganadoras de la carrera, un milagro cumplido...
ResponderEliminarlindo post!
Gracias M. Que bueno que te sientas una ganadora. Saludos
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