Escondida entre los multicolores montes Apeninos, se encuentra la morada de un dragón bravío. Se discute, entre los especialistas, la razón por la cual, desde hace siglos, el animal fabuloso no accede a ser visto. Algunos afirman que se esconde por vergüenza, desde que perdió la capacidad de producir fuego. Otros, con mayor rigor histórico, aseguran que el dragón se condenó al ostracismo por remordimiento. Sólo así se explica que su desaparición haya sido concurrente con aquel famoso incendio de Roma.
jajajajaa...buenísimo! (y pensar que le habían echado la culpa al loquito de Nerón!)
ResponderEliminarjajaja, me encantó!
Y yo que todo este tiempo le echaba la culpa al cruel Nerón!
ResponderEliminar=) HUMO
El Dragon era un incomprendido social. Seguramente.
ResponderEliminarjajajajajajaj.... y Todos contra Neron... jajaja... buenisimo!!!! Ese dragon si que se paso de listo!!!!
ResponderEliminarEra la mascota de Neron????
ResponderEliminarjajajaja. Buenísimoooooooo
Besos
REM
Nada de exonerar a Nerón !
ResponderEliminarEl dragón actuó por encargo.
Luego, fue encerrado y obligado a callar...
Buenísimo, otra vez.
Un beso enorme, Martín.
Bravo, excelente cuento...
ResponderEliminarNo puedo decir más... quienes me antecedieron me quitaron las palabras de la boca (perdón, del teclado), pero lo dijeron mejor de lo que pude haberlo hecho yo.
Apapachos
Este dragón, si sigue encerrado va a generar más mitos.
ResponderEliminarBueno y divertido este micro.
¿Causalidad o casualidad? Yo apuesto por el dragón pirómano, Martín. Nerón es inocente.
ResponderEliminarUn saludo.
Ay, Los Apeninos... como Marco.
ResponderEliminar:P
Entonces, ¿el causante no fue nerón?
ResponderEliminarLajaaj que mas decir , lo dijeron los demas.
ResponderEliminarQue aburrido debe estar el dragon sin Neronjajaja
Quizás ahora no estaría mal que el buen dragón se diera una vueltecita por aquella ciudad para que apreciase lo que los humanos somos capaces de hacer. Probablemente sería tildado de comunista, como los jueces je, je.
ResponderEliminarY es que no escarmentamos.
Tal vez lo que nunca se dijo en la historia es que Nerón no era humano!! Saludos!
ResponderEliminarLa verguenza y el remordimiento, me dejaste pensando en eso!
ResponderEliminarExtrañaba pasar por acá!!! Muy lindos post como siempre!
Besoss
Pau
Coincido plenamente con SIL, Nerón fue el autor intelectual, el dragón es una victima más, razón suficiente para no salir toda la vida!!
ResponderEliminarSaludos!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarAhora entiendo la confusión al respecto; unos culpando a Nerón y este a la vez a los cristianos. La realidad fue que un simple e involuntario estornudo fue la causa que ocasiono esa gran tragedia. Los incendios en Roma en esa época eran muy habituales, ya que la mayoría de barrios populares estaban construidos con edificios de madera, y teniendo en cuenta que el clima del lacio no es muy húmedo. El fuego producido por el dragón se extendió con rapidez.
ResponderEliminarUn accidente fatal, pero al fin y al cabo un suceso accidental. Eso habrá que hacerle entender a nuestro amigo mitológico.
Excelente, Martín.
Disculpa, cancelé el anterior comentario porque por error lo envié antes de terminarlo.
Neogeminis, que bueno que te gustó! El pobre Nerón pagó las cuentas injustamente. Muchas gracias por tu comentario. Saludos
ResponderEliminarHumo, y Nerón era una víctima más! jaja Un beso
Carina, que interesante lo que planteas. La incomprensión natural de la sociedad hacia todos aquellos que tienen un gran fuego interior. Que bueno verte por acá. Un beso
Lisandro, pero a la larga el dragón pagó con su remordimiento! Gracias por tu comentario. Un abrazo
ResponderEliminarRembrandt, buena idea la de la mascota. Es una posible versión de la historia! jaja Un beso
Sil, esa teoría conspirativa me cierra y explica todo. Los especialistas estarán agradecidos. Gracias por tu comentario! Un beso
Nancy, veo que encontraste buenas palabras para agregar! Muchisimas gracias! Me alegra que te gusto! Saludos
ResponderEliminarJavier Ortiz, justamente los mitos se generaron desde su desaparición! Gracias por tu comentario! Saludos
Victor, me deja pensando tu pregunta. Me gusta la imagen del dragon piromano! jaja Coincido con vos. Un abrazo
Orologiaio, si, a mi también me trajo el recuerdo de Marco! Gracias por compartirlo. Un abrazo
ResponderEliminarRaúl, parece que no! Un abrazo
Mardelibertad, estoy seguro que lo debe extrañar. Gracias por comentar. Saludos
Luis, buena reflexión la tuya. Creo que tenés razón. El hombre sabe hacer más daño que el dragón. Gracias por tu comentario. Un abrazo
ResponderEliminarQuimera, o sea que el dragón se llamaba Nerón? jaja Buena teoría! Un beso
Paula, gracias por pasar por aquí y por tu comentario. Espero que regreses pronto. Saludos!
Harold, veo que son varios los que sostienen esa teoría. Voy a terminar pensando que es así. Gracias por tu comentario. Un abrazo
ResponderEliminarJavier, tu explicación resume la mejor de las teorías. Creo que después de eso, se acabaron los debates. Gracias por traernos claridad. Un fuerte abrazo
Amigo... no se si fue él, creo que fue alguien con muy malas intenciones, un ser humano con daño y culpó al dragón... era lo más fácil de creer...
ResponderEliminarEl dragón está triste.
Besos y abrazos.
Cuidate Martincito.
así que fue el dragón?
ResponderEliminarme gusta más esta versión que la de un loco emperador tocando la lira y creyendose dios
beso
Martín, me alegra saber que finalmente pudieras dar esquinazo a aquella rosa que corría tras de ti con cuchillo en mano y nos hayas podido traer este cuento tan revelador y fructífero; digo fructífero por la variedad de comentarios que se han dejado. Me ha encantado la versión del estornudo de Javier, solo espero que ese dragón no haya dejado descendencia o que al menos no haya heredado de su progenitor la facilidad de resfriarse.
ResponderEliminarBesos.
La culpabilidad tiende a que nos escondamos. Muy bien escrito Martín, un abrazo!
ResponderEliminarPlas plas plas. Muy buen relato. Ese dragón con remordimiento causante de incendios...
ResponderEliminarQuería felicitarte por conseguir el Primer Premio en el concurso de este mes de octubre en la web minificciones.com.ar, por tu micro "Bichos"...
Un saludo indio
Natalia, coincido con vos sobre la tristeza del dragón. Lo usaron de chivo expiatorio. Pobrecito! Gracias por tu comentario. Un beso
ResponderEliminarVir, por suerte el dragón no toca la lira. Eso ya sería demasiado fantasioso, no? Gracias por comentar. Saludos
Mara-mara, muy gracioso tu comentario. Sigo aquí por suerte, igual que el dragón! Un beso
Netomancia, coincido con vos. Dicen que por algo parecido se esconden los ñandúes. Gracias por tus palabras. Un abrazo
ResponderEliminarNo comments, doblemente gracias. Realmente fue una sorpresa ese primer premio en el concurso. Me alegró muchísimo recibir el reconocimiento de los colegas. Te mando un abrazo
Hola Martín:
ResponderEliminarQue bueno, me gusta.
Perdón por la ausencia, es que he estado a la busca y captura de una editorial que se moje.
Un cordial saludo, amigo.
Todo BICHO que camina, va a parar a la vitrina de Martín.
ResponderEliminar;)
Enhorabuena, amigo.
Mandy, que bueno verte de nuevo por aquí. Espero que hayas encontrado editorial. Me alegra que te haya gustado. Un beso
ResponderEliminarSil, deberá colocar una vitrina en una pared del living entonces? Estoy muy contento y sorprendido de haber ganado ese premio! Muchas gracias por notarlo y por mencionarlo aquí. Un beso
¿Quizá se aburrió de los hombres y sus exigencias?
ResponderEliminarSaludos
Dragón, quizás... no sería raro. Saludos!
ResponderEliminarAhora ya se donde se escondió el dragon despues de volverse rojo, gran pequeño relato.
ResponderEliminarGracias por pasar por mi blog.
Un saludo del bardo