Recorriendo el pastizal que rodea la laguna, una rana encantada se interpuso en mi camino y me pidió que la besara. "Sólo el beso de un hombre gentil puede romper el hechizo", croaba. Accedí a su pedido de modo elegante, imaginando un futuro esplendoroso en algún Palacio Real, pero me equivoqué. Mientras mi cuerpo encogía, verdoso y lleno de verrugas, alcancé a ver la silueta transformada de la hermosa princesa, huyendo a la carrera, con el rostro cubierto de lágrimas, y de vergüenza.
Una versión a lo Martín, de Shrek.
ResponderEliminarMe morí de risa.
Lindo chasquito se llevó...(ocurre a veces, y no solo con princesas que parecen ranas.jajaja)
BESOS DE LIVING.
juaz juaz juaz ayyy Martín vos y tus ocurrencias magníficas, je je je, muy bueno.. pero porqué huyó?, a ver explicame... je je je
ResponderEliminarUn abrazote gigante, cuidate mucho, besitos.
Vaya!!! de nuevo la necesidad de prosperar al precio que sea....cuanto encierran tus comentarios amigo....
ResponderEliminarMe encanta leerte, claro conciso concreto y bello....eres un artista de esta alquimia que son las palabras y las letras...
BESOS DE MUJER SIN ÁNIMO DE TRANSFORMARTE NI QUE ME TRANSFORMES
me recuerda a la cancion de Mana..."mariposa traicionera"....
ResponderEliminary si...hay muchas personas asi, parece un cuento "de la vida mesma"
un abrazo, Martin! Genial!
Pasa.
ResponderEliminarComo siempre, magnífico! No hay quien te iguale.
ResponderEliminarUn beso,
Lo único que se le puede reprochar el protagonista es que ha leído demasiados cuentos de hadas. Muy buen cuento...
ResponderEliminary cuantos no hemos soñamos con besar sapos que se conviertan en principes o princesas?? muy lindo pero porque huyo??
ResponderEliminar;) Saludos
Hola Martín. Acabo de entrar, por casualidad, en tu Living. Me parecen muy buenos algunos de los cuentos que he encontrado por aquí. Cuenta con mi regreso, todavía no los he leído todos.
ResponderEliminarhttp://realidadesparalelos.blogspot.com/
Muy bueno comos siempre leerte,
ResponderEliminarsaludos fraternos
un abrazo
Si es que... a quien se le ocurre hacer caso a una rana?
ResponderEliminarte fijaste si dejo un zapato
ResponderEliminarsuele pasar...
lo hacen para histeriquiarte
Sil, estoy lejos aún de poder escribir una historia como la de Shrek, pero reconozco que tiene algún parecido. Coincido con vos en que a veces ocurre. Gracias! Un beso
ResponderEliminarNatalia, cada cual puede sacar su interpretación. En mi opinión, la princesa sale corriendo por la vergüenza que sintió de haber engañado al pobre hombre. Me alegra que te hayas divertido. Besos
Rosa Roja, gracias por tu comentario tan generoso. Es cierto lo que decís, cuantos errores cometemos por querer alcanzar una meta de forma más facil... Un beso
Carina, buena relación del texto con la música. En este caso sería "rana traicionera". Gracias. Un abrazo!
Claudia, si mis cuentos son cortos, tus comentarios lo son aún más, pero esa sola palabra lo dice todo! jaja Gracias. Saludos
Clara, hay muchos buenos escritores rondando el mundo blogger, vos entre ellos, y muchos me superan. De todos modos, gracias por tu comentario tan generoso. Un beso
Alejandro, es cierto lo que decís. No todo es como en los cuentos! Gracias. Un abrazo.
ResponderEliminarMAGY, bienvenida al living! Creo que huyó porque no aguantó sentirse una traicionera y, mucho menos, presenciar la transformación del pobre hombre. De todos modos, estate atenta, la historia continuará. Saludos y gracias por tu visita.
Víctor, bienvenido al living! Me alegra que te hayas sentido cómodo por aquí. Regresa cuando quieras, te estaremos esperando. Voy a devolverte la visita. Saludos
Adolfo, gracias por tu constante apoyo. Es muy gratificante. Saludos
HYDRO, la pregunta sería: ¿a quién se le ocurre besarla?? Saludos
María del Sur, bienvenida al living! En esta historia no vi ningún zapato, pero habrá segunda parte, quién te dice aparezca ahí. Gracias por tu visita. Saludos.
A bueno!!!!! jejej...por lo menos sintió algo de vergüenza! ahora sólo resta esperar que pase alguna dama distraida y de buen corazón que acepte deshechizarte a vos, jejeje
ResponderEliminarun abrazo!
Neogeminis, mañana vendrá la segunda etapa del relato... a la misma hora y por el mismo canal!! Abrazo
ResponderEliminarEn mi barrio dirían "loca". Pero no le aclaro, porque la gente aquí tiene modales y no dice barbaridades.
ResponderEliminarMuy ingenioso!
Netomancia, en mi barrio dirían igual. Igual, gracias por cuidar los modales en el living. Te mando un abrazo
ResponderEliminarPor lo menos, le sacaste los colores y le removiste la conciencia....
ResponderEliminarSaludos.
Jo, qué cuento más triste. Eso es lo que le pasa a la buena gente. En fin, aún así no se debe nunca dejar de ser humano.
ResponderEliminarUn besito...
Qué desilusión!!! No siempre las princesas saben agradecer el beso que las liberó de ser ranas… jajaja
ResponderEliminarBesos rojos,
HR.
Pocas palabras y muchas imágenes. Nunca imaginé leer un "cuento cortísimo" como vos los llamás y quedarme tanto tiempo pensando. Es grandioso.
ResponderEliminarComo dije por ahí, una señal condujo a otra, y así fui descubriendo espacios cada vez más hermosos. Y en este sillón vendré a reposar cada día, y en este living me quedaré cada noche, a descansar, y relajarme con una lectura excelente.
Cariños!!
Naty
mmm me gustó esta pequeña historia, pero no entiendo porque al final ella se va llorando, si yo fuera ella iria riendo o algo asi =P
ResponderEliminareso le paso a él por suponer algo, en esta vida no nos podemos basar en suposiciones jejeje
Saludos
Sucede q muchas veces perdemos lo bueno buscando lo mejor.
ResponderEliminarUn beso Martin =)
Loose, bienvenida. Si, es verdad. Y los colores cambiaron de sujeto! Gracias. Un beso
ResponderEliminarJuls, estoy totalmente de acuerdo con vos. La vida siempre termina premiando los buenos actos. Esperemos a ver como sigue esta historia. Un beso
HR, siempre imaginé a las princesas como unas desagradecidas. Quizás sea un prejuicio mío. Si alguna princesa está leyendo esto, que por favor me pruebe lo contrario! jaja Un beso
Naty, Bienvenida al Living! Me alegra que te sientas cómoda en este lugar y que hayas encontrado tu sillón favorito. Las puertas estarán abiertas siempre para que regreses. Respecto al cuento, me alegra haberte invitado a la reflexión y agradezco tus elogios. Gracias por tu visita y por seguirme. Un beso
X!0M@, el llanto también puede ser de la emoción, mezclado con la vergüenza de haber defraudado al pobre hombre gentil. Gracias por tu comentario. Saludos
Andreita, muy buena reflexión acerca del relato. Por buscar la vida en un palacio, se quedó condenado a una laguna. Gracias por tu comentario. Un beso
ResponderEliminarmuy bueno, martin!
ResponderEliminarme sorprendió el final
y lei el que me sugeriste también, y debo confesar que me gustan tus cuentos de metamorfosis kafkianas!
saludos!!
Gracias Galán de barrio! Me alegra que te hayan gustado. Saludos
ResponderEliminarHabrá sido por imaginar un futuro esplendoroso?...
ResponderEliminarSus cuentos son concisos pero potentes! Muy buenos!
Besos
Pau
Nunca confíes en una rana.
ResponderEliminarEstimada Geodita, es un placer recibirte desde Rumania, y que te hayan gustado los relatos. Voy a devolverte la visita. Bienvenida al living! Saludos
ResponderEliminarPaula, en realidad le pasó por confiado, por andar dando besos a cualquier desconocida. Gracias por tu comentario. Besos
Adriana, las ranas suelen ser traicioneras, pero no me lo enseñaron en las clases de biología! Un beso
Ay, caramba, pues pobre tu personaje, deberá pasárselo a alguien más, jaja.
ResponderEliminarBuen texto, me gustó. Saludos
Gracias Noelia! ya vendra la segunda y tercera parte. Veremos que sucede!! Saludos
ResponderEliminarLo que yo llamo, besos mentirosos.
ResponderEliminarExcelente, Martín.
Gracias Raúl. Son besos mentirosos, sin dudas, y muy traicioneros! Saludos
ResponderEliminarMagnífico relato breve que podría haberse titulado 'Tú la llevas'.
ResponderEliminarConciso y bello.
Antonio
Antonio, bienvenido al living! Me alegra que te haya gustado el relato. Y alegra ver que t inspira nuevos títulos! Un abrazo
ResponderEliminarEmpecé con las albadas lelas de Víctor y ahora me metí en tus series. Esta es la primera que leo y me gustó.
ResponderEliminarQué martirio le tocará sufrir a la princesa de ahora en adelante... a la rana le queda la esperanza de recibir un beso tierno, con energía positiva y totalmente honesto. No perdió tanto :o)
Un abrazo.